Diez horas en la clínica pero sólo noventa minutos en el quirófano. El Rey Juan Carlos ingresaba a las 21:15 horas de este domingo en el Hospital USP San José para ser operado de la rotura del tendón de Aquiles. Lo hacía justo un mes después de que éste se le rompiera el pasado 4 de Agosto en la cena posterior a la entrega de premios en el club náutico de Palma. Fue allí donde sintió un dolor muy agudo en la pierna que de nuevo le ha llevado a pasar por la mesa de operaciones en menos de tres meses.
La intervención se ha llevado con éxito, bajo anestesia epidural según reza el parte médico oficial que ha leído el director gerente del Hospital USP San José Javier de Joz quien añadía que la operación ha consistido en la reparación de dicho tendón mediante cirugía abierta de reconstrucción y refuerzo con auto-injerto y plasma rico en factores de crecimiento. En otras palabras se le han hecho un par de incisiones en el talón para proceder a suturar el tendón y además se le ha inyectado plasma enriquecido procedente de la sangre del monarca con el fin de mejorar la cicatrización. Su Majestad, añadía el parte médico, se encuentra en buen estado en el Palacio de la Zarzuela, donde seguirá su recuperación.
De hecho a las 7: 30 de esta mañana un vehículo monovolumen de color marrón, con el Rey ataviado con ropa deportiva, salía del centro clínico en dirección al Palacio de la Zarzuela. Los primeros días, de diez a quince, el monarca deberá permanecer en reposo absoluto. Posteriormente comenzará a plantar el pie aunque probablemente con un caminador similar al que ha estado utilizando durante el último mes en los actos oficiales. Será entonces cuando pueda llevar a cabo su actividad cotidiana en su despacho del Palacio de la Zarzuela si bien deberá limitar sus audiencias y desplazamientos debido a su convalecencia. No será hasta dentro de dos meses cuando se pueda empezar a hablar de recuperación total si bien para realizar grandes esfuerzos deberá esperar un poco más.