El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este miércoles la querella por prevaricación presentada por la Abogacía del Estado contra el juez Juan Carlos Peinado, que investiga a su esposa, porque "se han atropellado derechos" reconocidos a la institución de la Presidencia del Gobierno desde 1886.
En la rueda de prensa de balance del curso político, Sánchez ha tachado de "montaje" la sucedido ayer, cuando Peinado acudió a la Moncloa para tomarle declaración como testigo, y ha tachado de "absolutamente patético y bochornoso" ver a las "asociaciones ultraderechistas pelearse" por ver quién accedía al Palacio.
A su juicio, la investigación a su mujer por supuestos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios es "un no caso" y lo que hay es "un gobierno que gobierna y una oposición que fabula", frase que ha repetido en varias ocasiones a lo largo de su comparecencia.
Sánchez ha insistido en que, ante ese "no caso", fruto de la "frustración e impotencia de una oposición que ha renunciado a la batalla legítima de las ideas, a poner encima de la mesa un proyecto político", lo que ha hecho la Abogacía del Estado es defender la institución de la Presidencia del Gobierno de España, su "dignidad" y la separación de poderes.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que ante la evolución económica, social y territorial del país la oposición no puede decir nada. "En vez de hablar de crecimiento económico, hablan de un no caso; en lugar de hablar de avances sociales, identifican la migración con la delincuencia; y en lugar de aportar y arrimar el hombro para resolver la crisis institucional derivada del conflicto en Cataluña, a todo lo llaman golpe de Estado", ha manifestado.
Sánchez se ha mostrado convencido de que "el tiempo pondrá las cosas en su sitio" y ha recalcado que el Gobierno seguirá gobernando y aprobando leyes "en beneficio de la mayoría social".