El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, considera un "gran honor" poder someterse esta tarde a la sesión de investidura en el Congreso, a pesar de que, al menos en la primera votación de mañana, no tiene garantizados los apoyos suficientes para ser elegido presidente.
"Es un gran honor poder vivir un momento como éste", ha afirmado Sánchez en su cuenta de la red social de Twitter horas antes de que suba a la tribuna del hemiciclo. El candidato socialista está ultimando su discurso en la sede de Ferraz en compañía de sus colaboradores y después de comer se desplazará al Congreso.
SIN APOYOS
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, encara el debate de investidura en el Congreso con la certeza de que por el momento no cuenta con los apoyos suficientes para ser investido presidente del Gobierno, porque tanto el PP como Podemos le siguen negando su apoyo.
Hasta antes de comenzar el debate y con el único apoyo garantizado de Ciudadanos, Sánchez hizo ayer un último intento para evitar el fracaso de su investidura con una nueva oferta a Podemos, Izquierda Unida y Compromís, aunque con escaso éxito. "No me resigno a que las fuerzas del cambio no sumen", ha asegurado.
Propuesta rechazada ya de plano por Podemos, que ha lamentado que la nueva oferta del PSOE sea sólo un "corta y pega" de su pacto con el partido de Albert Rivera. Iñigo Errejón ha lamentado que este documento aboque a una semana perdida y ha emplazado a los socialistas a retomar el diálogo después del fracaso de Sánchez, siempre que opten por un gobierno "plural" y "de cambio".
También Izquierda Unida ha dado un sonoro portazo a la nueva oferta. La Presidencia Federal de IU ha acordado votar no en la primera votación de mañana miércoles, convencidos de que es "imposible compatibilizar un programa social de izquierdas con una política económica de derechas".
Documento que no convence tampoco al PP, que ha criticado el "mercadeo" de propuestas de gobierno del líder del PSOE y ha recalcado que, cuando fracase en la investidura, "ahí estará el PP" con su presidente, Mariano Rajoy, al frente. Al margen de las posiciones de cada uno de los partidos, el debate comenzará esta tarde a las 16.30 horas con la única intervención del secretario general del PSOE sin límite de tiempo.
Ya mañana miércoles tomarán la palabra el resto de portavoces, comenzando por el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy. Según los cálculos del presidente del Congreso, Patxi López, la primera votación -en la que Sánchez necesita mayoría absoluta- podría llegar hacia las nueve de la noche de mañana.
Este horario llevaría a la segunda votación, en la que basta la mayoría simple, a las nueve de la noche del próximo viernes, 4 de marzo.
DECLARACIONES PREVIAS
De momento, su portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, se ha mostrado convencido de que "hoy puede ser un gran día para pasar la página negra de Mariano Rajoy" y de las políticas que "tanto sufrimiento" han causado a la ciudadanía durante los últimos cuatro años.
A su llegada a la reunión del grupo parlamentario socialista, que se ha celebrado apenas tres horas antes de que comience el debate, Hernando ha avanzado que éste va a abordar en su discurso los "grandes problemas que tiene España y la ciudadanía española".
Ciudadanos ha dejado claro que sigue con la mano tendida al PP para que facilite la investidura de Sánchez pese a los "insultos y las intoxicaciones" que estos días están lanzando dirigentes populares y cree que su acuerdo con el PSOE podría ser suscrito incluso por miembros del actual Gobierno.
Por su parte, el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, confía en que Pedro Sánchez, una vez que se celebre el debate de investidura, actúe "con menos narcisismo, menos prepotencia y más humildad" y esté "dispuesto a dialogar" para sacar al país de "la situación de bloqueo en la que le ha colocado".
Hernando ha lamentado que lo único que ha estado haciendo Sánchez desde las elecciones ha sido "bloquear la posibilidad de un gobierno estable en España". Críticas también desde Podemos. Pablo Iglesias ha admitido que no espera una oferta más de Pedro Sánchez esta tarde y considera además que "no sería serio" que "en el último minuto" buscara "jugadas efectistas" para cambiar el voto de Podemos.
"Nosotros seguimos teniendo la mano tendida para un gobierno de coalición, de cambio y progresista, pero creo que las jugadas efectistas en el último minuto serían una falta de respeto hacia los ciudadanos", ha remarcado.