El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anunció esta tarde de manera sorpresiva que suspende su agenda pública unos días porque necesita “parar y reflexionar” sobre si debe “continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor” tras la “operación de acoso y derribo” y “gravedad” de las acusaciones contra él y su esposa, Begoña Gómez.
Así lo trasmite en un carta dirigida a la ciudadanía que ha publicado en redes sociales en la que admite que “urge” valorar si “merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política”, continuar al frente del Gobierno “o renunciar a este alto honor”, y avanza que el próximo lunes, 29 de abril, anunciará su decisión.
“A pesar de la caricatura que la derecha y la ultraderecha política y mediática han tratado de hacer de mí, nunca he tenido apego al cargo. Sí lo tengo al deber, al compromiso político y al servicio público. Yo no paso por los cargos, hago valer la legitimidad de esas altas responsabilidades para transformar y hacer avanzar al país que quiero”, asegura.
En su carta, Sánchez llega a afirmar "Llegados a este punto, la pregunta que me hago es ¿merece la pena todo esto?. Sinceramente no lo sé". Tras ello declara sentirse profundamente enamorado de su mujer "que vive con impotencia el fango que sobre ella esparcen día sí y día también".
Sánchez ha asegurado en la misiva que, "a pesar de la caricatura que la derecha y la ultraderecha política" han hecho sobre él, "nunca" ha tenido "apego al cargo". "Si lo tengo al deber, al compromiso político y al servicio público. Yo no paso por los cargos, hago valer la legitimidad de esas altas responsabilidades para transformar y hacer avanzar al país que quiero", ha apuntado.
Pedro Sánchez no podría convocar elecciones hasta el próximo 29 de mayo, fecha en la que se cumple un año de la anterior disolución de las Cortes Generales.