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En la víspera de la puesta de largo de su candidatura para liderar el PSOE, la presidenta andaluza, Susana Díaz, ha reivindicado hoy que los socialistas se sienten "orgullosos de su historia" con un almuerzo en la taberna madrileña Casa Labra, donde Pablo Iglesias fundó el partido en 1879.

Díaz ha comido en Casa Labra con un grupo de jóvenes socialistas, según ha difundido ella misma en su cuenta de twitter, mientras que también en Madrid unos 600 socialistas debatían el documento político de su 39 Congreso Federal.

El tapeo en casa Labra es un clásico de las primarias socialistas en la capital, donde ya en 2010 la que fuera candidata a liderar la federación madrileña, Trinidad Jiménez, inauguró la tradición.

En aquella ocasión, Jiménez compartió croquetas de bacalao con el entonces militante más antiguo de Madrid, Juan José Arnedo, de 91 años.

La exministra, que en aquellas primarias era considerada la "candidata del aparato", perdió frente al autodenominado "candidato de las bases", Tomás Gómez.

A diferencia de Trinidad Jiménez, Susana Díaz ha elegido hoy para su fotografía a un grupo de jóvenes, a fin de presentarse ante los afiliados como una candidata capaz de unir el pasado y el futuro de su partido.