La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha acordado, por unanimidad, que la juez Mercedes Alaya no instruya el caso de los ERE ni ninguna de las otras macrocausas que comenzó, como los cursos de formación, una vez que logró la plaza de la Audiencia de Sevilla que solicitó.
En su acuerdo, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía considera que la medida de apoyo al juzgado de instrucción 6 de Sevilla, que instruye los ERE y cuya titular desde junio es María Núñez, quede limitada a la comisión de servicio que ya viene desarrollando el magistrado de refuerzo Álvaro Martín, según ha informado el Alto Tribunal en un comunicado.
La decisión del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía se somete "a la consideración del Consejo General del Poder Judicial", el órgano que tiene la última palabra sobre las comisiones de servicio judiciales y que en junio propuso dos comisiones de servicio para el juzgado, una para Alaya y otra para que Álvaro Martín se hiciera cargo de los asuntos ordinarios.
La comisión aprobada por el Consejo concedía a Alaya la instrucción de los ERE y el delito societario de Mercasevilla, pero a la magistrada le pareció insuficiente y pidió que le dieran también los cursos de formación y los avales de la Junta a empresas, aunque finalmente no instruirá ningún caso.
Para hacer valer su idoneidad como instructora en todas las macrocausas, Alaya remitió un escrito al Consejo en el que descalificaba a su sucesora por su "estrecha amistad" con el consejero andaluz de Justicia, Emilio de Llera, y dudaba de sus conocimientos para la instrucción penal.
Tras analizar y valorar las circunstancias que se han producido en este caso, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía propone que la medida de apoyo judicial quede limitada a la comisión de servicio que ya ejerce Álvaro Martín, que quedará integrado plenamente en el refuerzo para la tramitación de las diligencias previas de los ERE, los cursos y los avales. "Todo ello, sin perjuicio de otras medidas de refuerzo y de colaboración futura", precisa el Tribunal.
La Sala de Gobierno del Alto Tribunal "entiende conveniente el plan de refuerzo inicialmente diseñado" para el juzgado de instrucción 6, "pero debe variar por las especiales circunstancias que concurren, determinadas por vicisitudes posteriores al primitivo acuerdo de 23 de junio".
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, en su nota de prensa, no explica las "especiales circunstancias" que concurren en este caso. Tras ese acuerdo, Alaya remitió el escrito crítico con Núñez, que en julio dividió el caso de los ERE en contra del criterio que siempre sostuvo su antecesora.
La instrucción de los ERE la empezó Alaya en enero del 2011 y acumula 263 imputados, entre ellos los expresidentes socialistas andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán junto a varias decenas de altos cargos de la Junta de Andalucía, comisionistas de aseguradoras y trabajadores que cobraron ayudas sin cumplir los requisitos.
Tras el escrito crítico de Alaya, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía pidió al Poder Judicial que valorara la "falta de voluntad de colaborar" de la magistrada con Núñez, aunque no propuso un cambio en la comisión de servicio que se había aprobado, lo que se ha pospuesto hasta ahora y para lo que se ha esgrimido que la causa de los ERE se dividió en julio pasado.
En otro escrito, Alaya también criticaba al juez que ella tenía de apoyo, Álvaro Martín, y reprochaba al TSJA que tomara las medidas de refuerzo "sin tener el menor conocimiento" de la situación del juzgado ni de las macrocausas que instruía.
Esos escritos, según han señalado fuentes judiciales, han sido los que han provocado el retraso en la decisión sobre el destino de Alaya, que, mientras tanto, trabaja en la sección séptima de la Audiencia, la que resuelve los recursos de los ERE.
La juez Núñez, por su parte, remitió otro escrito en el que aseguraba que no necesitaba a Alaya en el juzgado y que sí requería más funcionarios para las numerosas macrocausas que se tramitan.