Objetivo que los piratas del siglo XXI, empresas con potentes barcos e infraestructura suficiente para buscar y encontrar riquezas arqueológicas, no se hagan de manera gratuita con los tesoros de los paises.
Por eso desde hoy varios barcos de Salvamento Marítimo y la Armada rastrearán la zona marítima de Cádiz, para trazar un mapa detallado de los barcos hundidos en esa zona.
Una especie de inventario de nuestros tesoros marinos. De hecho el primero ha sido el cazaminas Turia de la Armada, que rastrea las aguas del golfo de Cádiz, buscando e identificando los restos de naufragios en la desembocadura del Guadalquivir y Tarifa.
Se están utilizando sonar y medios subacuáticos, rastreandio con detalle hasta una profundidad de 200 metros. La marina mantendrá el Turia al menos hasta el 20 de octrubre, fecha en la que le relevará el Sella...
En esta misión también está previsto que participen buceadores.
El fin es obtener una Carta Arqueológica subacuática, que permita falicitar la localización y evaluación de los yacimientos, valorandio a la vez el riesgo al que están sometidos.
Con esta carta se trata de evitar casos como los del barco cazatesoros Odissey que rastrea cualquier parte del planeta donde haya tesoros para expoliarlos. El Estado español le reclama en los tribunales al Odissey 500 millones de dólares de un tesoro obtenido en 2007.