Militante declarado del Partido Comunista, Teddy Bautista se lanzó al mundo de la música con el grupo Los Canarios. Posteriormente, al lado a Camilo Sesto participó en Jesucristo Superstar.
Y aunque en 1977 se bajó de los escenarios no dejó de ser protagonista de portadas y de la actualidad. En el 95 tomó el mando de la Sociedad General de Autores y Editores. Desde la fecha, la eficacia recaudadora de la SGAE es innegable. Bautista se defendía de quien criticaba que su salario superara al del propio Presidente del Gobierno, enbolsándose cada año 250 mil euros y contando con el 60% de su sueldo para la pensión de jubilación.
Especialista en acaparar titulares a cambio del odio popular. Es el responsable del canon digital y no quería dejar las posibilidades de la tecnología en "la gente sin escrúpulos y de las bandas organizadas de la piratería"
Un canon que ni se sabía lo que era cuando un inspector de la sociedad llamaba a la puerta de algún establecimiento público para cobrar. El presidente, era consciente de ello y de sus polémicas actuaciones en un festival benéfico o el caso televisivo de una peluquera catalana.
El Comité de Empresa de la SGAE pidió el pasado año a la Ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, una auditoría externa e independiente ante la que describían como "alarmante situación" por la que pasa la sociedad. Bautista ironizaba ante las acusaciones: "No se sabe qué hacemos con el dinero" y tachaba de leyenda urbana lo que se publicaba sobre el tema.
Una transparencia difusa en el entramado de empresas de lidera: al menos cinco, entre ellas, Microgénesis, imputada en la Operación Saga.
Apoyos no le han faltado en todo este tiempo... y su vinculación al Gobierno Socialista ha quedado patente en varias ocasiones.
Reelegido estos días presidente de la sociedad, se sospecha que parte de los fondos de la SGAE pudieran haber financiado su campaña. En las urnas un apoyo masivo que siempre ha contrastado con sus polémicos métodos de gobierno.
