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Los científicos creen que pueden repetirse los terremotos con magnitud mayor a 4.6 en la escala de Richter en El Hierro, como el registrado a la medianoche de hoy, y sostienen que "gana probabilidad" el escenario de una posible erupción submarina al norte de la isla.

Así lo ha manifestado hoy la directora del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en Canarias, María José Blanco, que es portavoz científica del comité director del plan de protección civil de emergencia por riesgo volcánico (Pevolca), que hoy celebró una nueva reunión para analizar la evolución del proceso eruptivo en curso.

María José Blanco ha explicado en rueda de prensa posterior a la reunión que los datos de la sismicidad que se ha registrado en los últimos cuatro días al norte de El Hierro apuntan a una posible erupción submarina en esta zona, sin descartar que haya un posible proceso eruptivo en tierra.

En todo caso, detalló la portavoz científica, los parámetros sometidos a observación en la isla -la emisión de gases, la deformación de la corteza y la sismicidad- indican "claramente", sobre todo esta última, que hay una fuente de tremor (el indicador de riesgo de erupción) distinta de la del sur, en el mar frente a La Restinga.

También precisó que de registrarse una erupción en tierra provocada por este nuevo "centro emisor" en el norte, se observarían variaciones en la emisión de gases y en la deformación y por el momento, los parámetros no indican unos picos "tan altos" ni tan acusados como en el proceso eruptivo del sur.

María José Blanco señaló que en Canarias las erupciones son mayoritariamente fisurales y de haber un nuevo proceso en el norte de El Hierro, éste sería el escenario.

En la erupción submarina de La Restinga "el escenario sigue siendo el mismo", pues continúa la emisión de material y el tremor mantiene una amplitud constante, aunque no se observa burbujeo en la superficie marina ni anormalidades térmicas.

La investigadora indicó también que el buque oceanográfico "Ramón Margalef" repetirá el estudio sobre la batimetría de la zona y reiteró que el que siga existiendo una deformación en El Golfo y que los terremotos "lejos de disminuir, sigan creciendo en magnitud" implican que hay una nueva entrada de material en el norte de la isla.

La forma de "cubeta" de la zona de El Golfo, los materiales depositados en este área y su estructura provocan que las intensidades de los movimientos sísmicos sean "ligeramente superiores" a los registrados al inicio del proceso eruptivo en El Hierro, continuó María José Blanco.

El director general de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias, Juan Manuel Santana, aseguró que se mantienen todas las medidas de precaución entre ellas, el cierre del túnel de Los Roquillos que conecta Frontera con Valverde, porque persiste el riesgo de desprendimientos.

Santana indicó que los vecinos de la zona de Las Puntas oyeron anoche desprendimientos, aunque luego durante el día no se han visto rocas, pero podría haber sucedido que cayesen fragmentos y no se sabe a qué altura quedaron las piedras.

En cuanto a medidas de desalojo de la población ante una posible nueva erupción, Juan Manuel Santana señaló que hay que ponderar el riesgo, que aumentaría si el proceso ocurre cerca de tierra y si por el contrario, es lejano a la costa, hay posibilidades de que nop sea perceptible que se está produciendo una erupción.

En cuanto a las quejas de algunos científicos de que no tienen acceso a las muestras y a la investigación sobre el fenómeno eruptivo, María José Blanco manifestó que todo investigador que haya seguido los cauces establecidos en el Pevolca para realizar investigaciones "ha sido autorizado".

NUEVO TERREMOTO DE 4,6 EN EL HIERRO

El movimiento sísmico de 4,6 grados en la escala Richter que se ha registrado esta madrugada en la isla de El Hierro fue sentido también en islas como Tenerife y La Palma y provocó desprendimientos en una carretera comarcal.

Fuentes del servicio de urgencia 112 han informado de que tras el seísmo, que es el de mayor magnitud de los registrados en la isla de El Hierro desde que en julio comenzó la crisis sísmica, se recibieron 29 llamadas de personas que sintieron el movimiento. Las llamadas procedían de la isla de El Hierro, de municipios del sur del Tenerife y del municipio de Los Llanos de Aridane, en La Palma.

Las fuentes informaron de que la única incidencia que se ha producido es unos desprendimientos en una ladera, que provocó el corte de la carretera comarcal HI1, que fue abierta al tráfico sobre las 2 de la madrugada. Durante la madrugada, además de este terremoto, se han registrado otros 21 movimientos sísmicos, todos localizados en el noroeste de Frontera y a una profundidad de entre 17 y 24 kilómetros, según la página web el Instituto Geográfico Nacional.

De estos terremotos, dos, de 3,1 y 2,8 grados en la escala Richter, han sido también sentidos por la población.