Mas se compromete con una consulta soberanista y Margallo dice que "no es posible"

El Govern espera que los actos de la Diada de Cataluña, marcados este año por la Vía Catalana hacia la independencia, sean "un punto de refuerzo" para su plan soberanista y ofrezcan también visibilidad internacional a la reivindicación de la consulta de autodeterminación.

Es el pronóstico que ha hecho hoy el conseller de la Presidencia y portavoz del Govern, Francesc Homs, en la vigilia de una Diada marcada por una cadena humana de norte a sur de Cataluña que, aunque está organizada por una entidad privada, la Asamblea Nacional Catalana (ANC), cuenta con el apoyo del ejecutivo catalán.

En vísperas de la Diada catalana, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha reafirmado este martes su compromiso con la convocatoria de una consulta "dialogada y pactada" en una carta que ha enviado a los alcaldes de Cataluña con motivo de la Diada del 11 de septiembre.

"Mi compromiso de hacer posible la voluntad popular y el mandato parlamentario es inequívoco. Poder decidir nuestro futuro colectivo es poder ofrecer un futuro de mayor prosperidad y bienestar", reza la misiva. Según Mas, progreso nacional y social forman parte del "eslabón de una misma cadena", por lo que ha requerido el apoyo de los alcaldes a la cadena humana que bajo el slogan de la "vía catalana" pretende recorrer el territorio de Cataluña.

Mas ha querido hacer un reconocimiento a su trabajo y les ha pedido facilitar "tanto como sea posible el servicio publico que es la política municipal".

Para el presidente de la Generalitat, la Diada permite un año más expresar la voluntad de Cataluña de "ser como nación", y así se hará a través de los actos institucionales y de las actividades organizadas, como la de la 'Via catalana' --aunque no cita su nombre--. "Tenemos que sentirnos orgullosos del sentir patriótico y de la fuerza y vitalidad de nuestros conciudadanos, que nos permite a todos mostrar bien fuerte el orgullo y la estima para nuestro país", ha concluido.

Anoche , el presidente de la Generalitat, Artur Mas, realizaba un llamamiento a los catalanes a participar en la 'Via Catalana' de la próxima Diada, comparando esta movilización con la que se hizo Martin Luther King, hace 50 años en Estados Unidos, en defensa de la igualdad de los ciudadanos de origen afroamericano.

Lo dijo en la inauguración de 'El Born Centre Cultural', la restauración del recinto del mercado del Born, en cuyo subsuelo hay las ruinas del antiguo barrio de La Ribera, que fue demolido tras la capitulación de la capital catalana en la Guerra de Sucesión. Allí, Mas expresó su convencimiento de que "el Siglo XXI será el siglo en el que Cataluña recuperará su plena libertad".

MARGALLO: NO ES POSIBLE UN REFERENDUM PACTADO EN CATALUÑA

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García Margallo, ha cerrado la puerta este martes a un referéndum pactado y ha apostado por "buscar una fórmula" que permita a Cataluña "encajar" en España a través de una reforma de la organización territorial del país respetando siempre la unidad de España y una revisión del modelo de financiación.

Durante su intervención en un desayuno informativo en el Forum Europa, Margallo ha dejado claro que "no es posible un referéndum pactado" en Cataluña y sólo podría optar por una declaración unilateral de independencia, lo que a la vez supondría su salida inmediata de la Unión Europea.

En este punto, ha recordado que la Constitución española es del año 1977 y "es probable" que deba ser revisada la organización territorial del Estado, "respetando siempre" el artículo 2 que designa la "indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles". Por tanto, "no hay posibilidad de un referéndum pactado".

En su intervención en la inauguración del Foro España Internacional, el ministro insistió en que la cadena humana a favor de la independencia convocada mañana, con motivo de la Diada, "es una manifestación clara de que en España existe la libertad de expresión".

García-Margallo insistió en que el derecho de autodeterminación no está recogido en el derecho internacional más que en casos muy concretos que no son, dijo, los de esa comunidad autónoma, y añadió que una "eventual salida de Cataluña de España sería necesariamente una declaración unilateral de independencia". Además advirtió que "el 'adeu' a España es el 'adeu' a la Unión Europea".

Con la convicción de que ese es "un camino cerrado", admitió que hay que buscar "una fórmula que permita a Cataluña encajar en España" y que "satisfaga los deseos de los catalanes". En su opinión, habría que "revisar la organización territorial" del Estado que fue diseñada hace tres décadas y cuya remodelación tiene mucho que ver con resolver los problemas de financiación de Cataluña, algo que consideró "relativamente sencillo", para acabar con el "clima de desafección".

ACTOS DE LA DIADA

Cataluña celebrará este miércoles 11 de septiembre, su Diada en un momento álgido del proceso soberanista, en una jornada que estará marcada por una cadena humana independentista que recorrerá Cataluña de norte a sur, aunque los últimos contactos entre Mariano Rajoy y Artur Mas han suavizado las relaciones Gobierno-Generalitat.

La efervescencia del debate soberanista derivará en una Diada con récord en el número de actos, de diverso perfil, y que arrancarán a primera hora de la mañana con las tradicionales ofrendas florales al monumento a Rafael Casanova por parte de instituciones, partidos (menos PPC y Ciutadans) y entidades de todo tipo.

A continuación, el barcelonés parque de la Ciutadella acogerá un acto abierto a la ciudadanía que, presidido por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, tendrá como hilo conductor la lengua catalana.

Este evento servirá para celebrar conmemoraciones como el centenario de la promulgación de las normas ortográficas del Institut d'Estudis Catalans y el nacimiento del poeta Salvador Espriu, así como el cincuenta aniversario de la muerte de la bailaora barcelonesa Carmen Amaya.

El acto de la Ciutadella estará conducido por la actriz Mercè Pons y arrancará con un desfile de la formación de gala de los Mossos d'Esquadra y la entrega de la 'senyera' por parte de un municipio de Cataluña, que en esta ocasión será el d'Arenys de Mar (Barcelona), cuyo "Cementiri de Sinera" imaginó Espriu.

Participarán, con interpretaciones musicales y lecturas de textos, entre otros, el Orfeó Manresà, Túrnez & Sesé, Jordi Vidal, Toni Xuclà, Karime Amaya, Coco, Tañé, Tuto i Joni, y actores como Joan Pera, Jordi Boixaderas, Àlex Casanovas o Carme Elias.

La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha anunciado este martes en el Senado que su partido no participará en los actos derivados de la Diada por considerarla "Diada de división" derivada del "proceso independentista" que, a su juicio, ha iniciado el Gobierno de Artur Mas con el apoyo de ERC.

Por su parte, Ciutadans y su líder, Albert Rivera, celebrarán cuatro actos simultáneos en las capitales de provincia, uno de ellos en el barrio barcelonés de la Barceloneta, en los que lanzarán 3.500 globos para reivindicar ser catalán, español y europeo, y como muestra de "convivencia" frente a las "cadenas".

Asimismo, la plataforma Movimiento Cívico de España y Catalanes repartirá en seis lugares de la ciudad de Barcelona "lazos de hermandad" a favor de una "Cataluña de todos" dentro de España.

El PSC no celebrará ningún acto específico porque acudirá como siempre a la celebración institucional de la Ciutadella, el lugar donde exhibir la unidad de los catalanes, según fuentes socialistas.

También por la mañana se celebrará en Sant Boi de Llobregat (Barcelona) las ofrendas florales ante la tumba de Rafael Casanova, protagonizadas también por políticos y ciudadanos.

UNA CADENA HUMANA DE NORTE A SUR

Por la tarde, y después de que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) sea recibida por el presidente catalán y la presidenta del Parlament, se celebrará la Vía Catalana hacia la Independencia, una cadena humana que pretende recorrer Cataluña de norte a sur a lo largo de 400 kilómetros.

La Vía Catalana está inspirada en la cadena humana de 600 kilómetros que en 1989 protagonizaron miles de ciudadanos de Estonia, Letonia y Lituania para reclamar la independencia de las tres repúblicas bálticas de la URSS.

La ANC, una entidad privada que cuenta con miles de socios y que tiene por objetivo lograr la independencia de Cataluña, ha recibido el apoyo activo de CDC y ERC, y la simpatía de algunos dirigentes de UDC, ICV y PSC, formaciones estas tres últimas que no apoyan la cadena porque ponen el énfasis en el derecho a decidir.

El recorrido a través de 80 municipios pretende enlazar, gracias a varios centenares de miles de personas, El Pertús, en el sur de Francia y a pocos kilómetros de Perpiñán, con Alcanar, el último pueblo del sur de Tarragona y al que acudirán muchos autobuses de Barcelona para asegurar la continuidad de la cadena.

Por Barcelona, la cadena pasará por lugares emblemáticos como la plaza Sant Jaume, la Sagrada Familia o una parte del campo del Barça.

Este dispositivo, arropado por la seguridad de 2.500 agentes de los Mossos y los servicios públicos de sanidad, comportará "severas" restricciones de tráfico en las carreteras durante cinco horas.

Entre las 13.00 y las 18.00 horas, la cadena provocará alteraciones en el tráfico de una quincena de carreteras, entre ellas algunas importantes como la AP-7, la A-2, la N-340 o la N-II.

La unión de la cadena se iniciará a las 17.14 horas, en recuerdo a la emblemática fecha del 1714, cuando Barcelona cayó a manos de las tropas borbónicas en la guerra de Sucesión.

Pese a la movilización ciudadana, la tradicional manifestación en el centro de Barcelona organizada por la Coordinadora de Entidades Independentista se ha mantenido, trasladándose a las 19.00 horas.