Los tres consellers de Unió abandonarán el Govern que preside el convergente Artur Mas tras rechazar el ultimátum de CDC para que se adhiera a una lista independentista de cara al 27S, aunque UDC evita dar el paso de romper la federación y garantiza la estabilidad parlamentaria del Ejecutivo catalán. Esta decisión de la formación democristiana que lidera Josep Antoni Duran Lleida ahonda la crisis en CiU, que parece dirigirse hacia una ruptura tras 37 años de alianza.
La dirección de Unió ha celebrado hoy una reunión de tres horas para abordar la respuesta al ultimátum de CDC para decidirse sobre si se suma a la hoja de ruta a favor de la independencia, que Convergència acordó con ERC y las entidades soberanistas de cara a un adelanto electoral el 27 de septiembre.
"La salida del Govern es por coherencia y no quiere romper la federación de CiU", ha subrayado en rueda de prensa el secretario general de UDC, Ramon Espadaler, quien ha recalcado que la decisión de hoy no afecta a la federación en otras esferas como el Congreso de los Diputados o los ayuntamientos.
Sin embargo, el democristiano no ha concretado con qué formato se va a presentar Unió a las elecciones catalanas ni qué futuro inmediato le depara a una federación con planteamientos distintos en cuanto al proceso soberanista.
Espadaler ha asegurado que el presidente de la Generalitat y de CiU, Artur Mas, ya ha sido informado de la decisión "mayoritaria" de la dirección de Unió, por la que marcharán del Govern la vicepresidenta, Joana Ortega, el propio Espadaler, como titular de Interior, y el conseller de Agricultura, Josep Maria Pelegrí.
A la espera de que Mas, que reúne esta noche a la ejecutiva de CDC, haga efectiva la salida de los consellers democristianos, Ortega ha decidido ya que abandonará todos sus cargos políticos -es también vicepresidenta de la ejecutiva UDC- y quedará como militante de base.
LOS CRÍTICOS: GRAVE IRRESPONSABILIDAD
La salida de los consellers, que también afecta a otros cargos de UDC en el Govern como secretarios y directores, se ha adoptado en el comité de gobierno sin unanimidad, con 16 votos a favor, 10 en contra y 2 abstenciones.Los votos contrarios son del sector independentista de UDC, que encabeza Antoni Castellà, quien ha rechazado dejar su cargo de secretario de Universidades de la Generalitat, desoyendo la propuesta de la dirección de UDC, que él ve como una "grave irresponsabilidad".
Castellà ha aseverado que ni él ni otros representantes del sector crítico contribuirán con su salida del Govern a hacer "chantaje" o a "presionar" al president Artur Mas para que renuncie a la independencia: "Nos mantendremos firmes", ha recalcado.
Por su parte, en Twitter, el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, ha reprochado a CDC que no haya habido diálogo para tratar de encajar los diferentes planteamientos de los dos socios de federación y ha manifestado su apoyo al secretario general de UDC.
En la misma línea, Espadaler ha lamentado las "formas" de CDC por lanzar un ultimátum al que, sin embargo, han dado respuesta antes del plazo exigido -el sábado-.
Pero el secretario general de UDC y de CiU no ha clarificado si en las próximas elecciones catalanas Unió concurrirá por separado. Preguntado por la posible lista transversal del presidente catalán sin las siglas de CiU, Espadaler ha dicho que "ni se ve ni se deja de ver" dentro de la misma, porque ha asegurado que desconoce el proyecto, por lo que UDC aguardará a que se concrete el escenario del 27S para tomar una decisión.
En todo caso, el número dos de UDC ha asegurado que su partido dará apoyo al gobierno de la Generalitat "hasta el último de los días de esta legislatura", tanto si se termina el 27 de septiembre como más tarde, ha recalcado.
Espadaler ha insistido que UDC no quiere romper la federación de CiU y ha señalado que en sus conversaciones con los dirigentes de CDC ha apreciado "una voluntad de las dos partes" de que esto no suceda.
En este sentido, ha asegurado que la decisión no afecta al grupo parlamentario de CiU en el Congreso de los Diputados, que seguirá dirigiendo Josep Antoni Duran Lleida hasta las elecciones generales.
MAS EVITA VALORAR SU SALIDA
El presidente catalán, Artur Mas, y la vicepresidenta del Govern, Joana Ortega (Unió), han evitado esta tarde valorar la salida de los tres consellers de UDC del Ejecutivo catalán. "Ahora no. Ya hablaremos en su momento", se ha limitado a decir el presidente de la Generalitat al ser preguntado.
Poco después, Joana Ortega ha evitado hacer cualquier tipo de comentario cuando se dirigía al hemiciclo, donde una vez dentro se ha sentado al lado del presidente catalán.
La expectación ha sido una constante en los pasillos del Parlament, donde varios diputados de CiU o la misma consellera de Educación, Irene Rigau, han seguido por sus teléfonos móviles o en televisores la comparecencia de Espadaler.