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El Estado registró un déficit de 38.765 millones de euros entre enero y noviembre, el 3,68% del PIB, frente al saldo negativo de 71.525 millones registrado en el mismo periodo de 2009, lo que supone una reducción del 45,8%, según ha avanzado el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.

Este resultado fue consecuencia de unos pagos que se situaron en 162.125 millones de euros, un 4% menos que hace un año, y de unos ingresos de 123.360 millones, un 26,8% más.

En términos de caja, una metodología contable que anota los ingresos y pagos que efectivamente se han realizado, el déficit del Estado ascendió a 43.047 millones de euros en los once primeros meses del año, frente al saldo negativo de 68.509 millones registrado en el mismo periodo del año anterior.

Los ingresos impositivos crecieron por noveno mes consecutivo al aumentar un 11,1%. En concreto, el impacto de la subida de los tipos de IVA ha permitido mejorar la recaudación de este impuesto, elevándola un 45,4%, hasta 46.947 millones.

En rueda de prensa, Ocaña ha asegurado que los datos permiten decir que el Estado cumplirá con la previsión incluida en el programa de estabilidad.

FUNCAS VE PROBABLE QUE EL GOBIERNO ADOPTE MEDIDAS ADICIONALES PARA REDUCIR EL DÉFICIT EN 2011

El director del Gabinete de Coyuntura de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), Angel Laborda, ha advertido de que la previsión del Gobierno de que el PIB crezca un 1,3% en 2011 "probablemente" obligue a tomar medidas adicionales para recortar el déficit público al 6% el próximo año. Para Laborda, las estimaciones de ingresos y gastos conducen a un déficit para el conjunto de las administraciones públicas del 6,3%, es decir, tres décimas más que lo comprometido con Bruselas.

En el último número de 'Cuadernos de Información Económica', el director de Coyuntura de Funcas estima, no obstante, que el objetivo de déficit del 3% para 2013 "no debería plantear problemas", dado el ajuste estructural entre éste y el próximo año, al reducirse del 9,4% al 4,2%.

Ahora bien, para minimizar el impacto del ajuste sobre el crecimiento, la consolidación fiscal restante debería recaer, según Laborda, en el gasto corriente, sobre todo en el consumo público, con lo que aboga por reformas de reestructuración de las administraciones públicas.

Ante la escalada de la prima de riesgo por las dudas de los mercados sobre las cuentas públicas, el jefe de Coyuntura de Funcas también cree "probable" que el aumento de los gastos de intereses de la deuda, del 18,1% en los Presupuestos, "se quede corto".