El Gobierno ha aprobado el techo de gasto que servirá para elaborar los Presupuestos del año que viene, con un descenso del 3,2% respecto al techo de gasto del año pasado, hasta 129.060 millones de euros.
La cifra de 2015 resulta de una previsión de ingresos de 133.712 millones de euros y un objetivo de déficit de 30.959 millones, cantidades a las que hay que restar la financiación de las administraciones territoriales (32.941 millones) y unos ajustes de contabilidad nacional de 2.670 millones.
Los ingresos, tal y como ha explicado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, crecerán un 4,3% a pesar de la rebaja fiscal que entrará en vigor el año que viene, por el ensanchamiento de las bases imponibles que provocará la recuperación. Montoro ha justificado esta previsión y ha rechazado la idea de que sea demasiado optimista, puesto que, hasta mayo de este año, los ingresos están creciendo ya a un ritmo del 6,6%.
"Me dirán que (la previsión) es optimista porque forma parte del guión, pero hay guiones imposibles de salvar", ha lamentado.
A pesar del aumento de los ingresos, Montoro ha explicado que para alcanzar el objetivo de déficit del Estado para el año que viene (2,9%) es necesario reducir el límite de gasto no financiero.
Así, ha reiterado el "compromiso absoluto" del Gobierno con la reducción del déficit público y ha destacado que la recuperación de la economía española hace posible que se pueda compatibilizar una rebaja de los impuestos con la reducción del gasto público.
En este sentido, Montoro ha señalado que para 2015 "no se plantea una nueva reducción del gasto público en términos absolutos", sino que se contiene su incremento, de manera que "no habrá nuevos ajustes a la baja" porque "no son necesarios para consolidar los objetivos".
De este modo, ha explicado que la rebaja del techo de gasto no quiere decir que se reduzca en la misma cuantía (-3,2%) el gasto de los ministerios, ya que la propia recuperación "implicará un mayor ahorro". Montoro ha puesto como ejemplo el ahorro que se producirá en el gasto en desempleo por la recuperación del empleo y en los intereses para financiarse.
"La contención del gasto y el ahorro derivado de la propia recuperación nos conmina a presentar un límite de gasto decreciente, pero asentado en la recuperación económica", ha precisado Montoro, que ha afirmado que España continúa desarrollando una política "austera" porque así lo exige la situación y los compromisos que ha adquirido.
El ministro ha señalado que, a pesar de la reducción del gasto público en los últimos años, el gasto social "ha ganado proporciones", de manera que elementos "sustanciales" del Estado de Bienestar, como las pensiones, "no han retrocedido, sino que han aumentado".
"Ha habido que sacrificar otros gastos, pero los Presupuestos Generales del Estado tienen un componente de gasto social de los mayores de su historia año a año, y los Presupuestos de 2015 volverán a tenerlo por el peso del desempleo", ha apuntado.
BAJARA EL GASTO EN DESEMPLEO
En cualquier caso, ha insistido en que el gasto en desempleo se reducirá en 2015 "porque la gente dejará de perder su empleo y, al no ser despedida, generará menos derechos de paro porque no será despedida". "Ya se está ahorrando en desempleo y ocurrirá mucho más en 2015", ha puntualizado.
De hecho, el límite de gasto no financiero que servirá para hacer los Presupuestos de 2015 se ha fijado partiendo de un escenario macroeconómico que prevé que el PIB crezca un 1,8% en dicho ejercicio y que la economía vuelva a crear empleo, con un incremento del 1,2%.
Tal y como ha repasado Montoro, 2015 será un año en el que crecerá el consumo privado y la inversión, lo que impulsará la aportación de la demanda nacional al crecimiento, mientras que se mantiene en positivo el sector exterior. El único elemento del crecimiento que seguirá cayendo el año que viene será el consumo público de las administraciones públicas, cuyo descenso, sin embargo, se irá moderando.
SANTAMARIA INSISTE EN QUE NO HABRA MAS AJUSTES
Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha subrayado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el techo de gasto fijado para 2015 "confirma que la reducción del déficit público" es un objetivo "prioritario" de la política presupuestaria del Gobierno.
Sáenz de Santamaría ha insistido en que el techo de gasto para 2015 continúa con la línea de contención del gasto seguida en los próximos años, preservando el gasto social y sin contemplar "ningún otro ajuste adicional". El techo de gasto será remitido antes de finalizar junio a las Cortes para su aprobación.