El décimo tercer aniversario del asesinato por parte de ETA del político socialista Fernando Buesa y de su escolta, el ertzaina Jorge Díez Elorza, ha concitado por primera vez el respaldo de todos los partidos políticos, incluida la izquierda abertzale tradicional integrada en la coalición EH Bildu.
Buesa y Díez Elorza murieron asesinados el 22 de febrero de 2000 cuando un comando de ETA hizo estallar un coche bomba en la zona universitaria de Vitoria.
Hasta hace dos días estaba convocada, como ocurre todos los aniversarios desde el atentado, una ofrenda floral en el lugar del asesinato, donde se erige un monolito, al que habitualmente asisten las familias y allegados y representantes de partidos políticos.
Pero ayer la Junta de Portavoces del Parlamento Vasco acordó hacer también una ofrenda floral en la Cámara después de que EH Bildu planteara al PSE-EE esta opción porque la coalición abertzale quería rendir homenaje a Buesa y a Díez pero temían que si acudían al acto de las familias podían incomodarlas.
Finalmente, hoy se han celebrado las dos ofrendas. A la de la Cámara de Vitoria ha acudido la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Laura Mintegi, que por primera vez ha participado en un acto en memoria de víctimas de ETA desde que ocupa este cargo.
También se da la circunstancia de que es la primera vez desde el inicio de la décima legislatura tras las elecciones autonómicas del pasado 21 de octubre en que el Parlamento de Vitoria celebra un acto de homenaje a víctimas del terrorismo.
A esta ofrenda se han sumado otros parlamentarios de EH Bildu en representación de las cuatro formaciones que integran la coalición: Pello Urizar (EA), Dani Maeztu (Aralar), Oskar Matute (Alternatiba) y Belén Arrondo (izquierda abertzale).
Partidos como EA y Aralar, integrados ahora en EH Bildu, sí que han asistido en multitud de ocasiones a homenajes a víctimas de ETA que han tenido lugar en el Parlamento en anteriores legislaturas, pero hoy es la primera ocasión en que la coalición como tal asiste a un acto de este tipo.
El acto ha durado unos dos minutos y ha concluido con un aplauso por parte de los presentes, entre ellos el lehendakari, Iñigo Urkullu, los consejeros de su Gobierno, la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejeria y parlamentarios de todos los grupos excepto de UPyD.
El único representante de UPyD en la Cámara, Gorka Maneiro, ha justificado su ausencia por la presencia de EH Bildu, una formación que, según ha denunciado, "se niega a condenar la historia criminal de ETA".
En la segunda ofrenda, la organizada por los familiares de Buesa y Díez, han estado representantes de todas las formaciones políticas, incluida UPyD.
Han acudido varios parlamentarios de EH Bildu, los representantes de EA (Juanjo Agirezabala y Arri Zulaika), Aralar (Rebeka Ubera) y Alternatiba (Oskar Matute), pero ninguno de los vinculados a la izquierda abertzale tradicional.
El homenaje a Buesa y a Díez Elorza junto al monolito que se levantó en su memoria se ha celebrado en un ambiente íntimo y familiar y, a diferencia de otros años, no ha habido ningún discurso político.
Las familias han sido las protagonistas de este acto, en el que los asistentes han depositado rosas rojas en el jardín que rodea el monolito.