La interposición de la querella contra Mas queda al criterio de los fiscales de Cataluña

La cúpula de la Fiscalía General del Estado y de la de Cataluña se han reunido hoy en Madrid para limar sus diferencias respecto a las acusaciones de la querella que están ultimando contra el presidente de la Generalitat, Artur Mas, por las posibles responsabilidades penales derivadas del 9N.

Tras el encuentro, la Fiscalía General ha informado en un comunicado que la Fiscalía Superior de Cataluña "dará cuenta al fiscal general del Estado de la decisión que adopte en el marco de los principios de legalidad e imparcialidad que rigen la actuación del ministerio público".

Según han informado a Efe fuentes jurídicas, la reunión se ha llevado a cabo a petición de la Fiscalía de Cataluña por las divergencias que mantiene respecto al borrador de la querella que le remitió la Fiscalía General del Estado y que estaba previsto presentar hoy.

A la reunión, celebrada en la sede del ministerio público, han asistido el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, acompañado del responsable de la Secretaría Técnica, Jaime Moreno, y, por parte de la Fiscalía de Cataluña, el fiscal superior, José María Romero de Tejada, y su número dos, el teniente fiscal Francisco Bañeres.

El objetivo de la reunión era acercar posiciones sobre los distintos puntos de vista que ambas Fiscalías mantienen en relación con la calificación jurídica de la querella, es decir los delitos que podrían imputarse al Gobierno catalán por la organización de la consulta alternativa del 9N.

Fuentes de la Fiscalía General han confirmado a Efe que en la reunión ha habido un intenso debate jurídico por la existencia de "criterios distintos en la calificación jurídica de los hechos" que contempla el texto, aunque ha rechazado que hubiera habido "tensión" en el encuentro.

De hecho, en su comunicado, la Fiscalía General del Estado ha informado de que durante la reunión "se ha estudiado la valoración jurídico-penal de los hechos acaecidos en torno al llamado proceso de participación".

LIMITAR LA QUERELLA A UN DELITO DE DESOBEDIENCIA

La Fiscalía de Cataluña recibió hace unos días un primer borrador de querella, que se dirige contra el presidente catalán, Artur Mas, la vicepresidenta, Joana Ortega, la consellera de Educación, Irene Rigau, y el conseller de Interior, Ramon Espadaler, y propone acusarles de los delitos de prevaricación y desobediencia, entre otros.

Ayer por la mañana, Romero de Tejada reunió a fiscales de la Fiscalía Superior de Cataluña, que tras estudiar el borrador de la querella propusieron atenuar su alcance y, entre otros aspectos, limitar la acusación contra el Gobierno catalán a un delito de desobediencia, que no lleva aparejado pena de inhabilitación.

Romero de Tejada y Francisco Bañeres han defendido hoy esa propuesta de modificación del borrador de querella ante Eduardo Torres-Dulce.

La Fiscalía de Cataluña, además, plantea la necesidad de excluir de la querella a Espadaler, a quien el borrador inicial propone imputar por la confección de las papeletas y urnas del 9N -que elaboraron presos de la cárceles catalanas-, aunque este conseller no es el responsable del sistema penitenciario catalán.

Aunque la reunión había sido confirmada desde la propia Fiscalía General del Estado, que había informado de que estaba convocada a las 17:00 horas, los medios de comunicación que se han desplazado a la puerta de la institución no han logrado obtener las habituales imágenes de los participantes en la cumbre fiscal, ya que los fiscales catalanes habían llegado a la institución tres horas antes.

Tampoco a su salida se les ha podido ver, como en otras ocasiones, en las que habían entrado y salido andando de la institución, lo que evidencia que los protagonistas de la cumbre querían estar alejados los máximo posible de los medios de comunicación.

Aunque los fiscales catalanes han estado más tiempo en el edificio, la Fiscalía General ha asegurado que la reunión ha durado hora y media y a su término no ha comunicado oficialmente si el Ministerio Fiscal interpondrá finalmente la querella y se ha limitado a sugerir que será el fiscal catalán el que tome finalmente la decisión sobre la querella.