El rey ha impuesto hoy el Toisón de Oro al presidente francés, Nicolas Sarkozy, a quien ha elogiado por propiciar "de manera firme y eficaz" la "mayor colaboración política, judicial y policial" entre Francia y España ara acabar con la violencia terrorista".
En sus palabras de agradecimiento, Sarkozy ha subrayado que "ya no hay Pirineos en la lucha contra el terrorismo", sino una determinación común de poner fin a su violencia, y ha advertido de que quienes han asesinado en España y en Francia "tendrán que rendir cuentas".
Tras hacerle entrega del Collar del Toisón y prender en su solapa la insignia que le reconoce como Caballero de la orden dinástica más prestigiosa del mundo, el monarca ha valorado cómo, en su relación con España, Sarkozy ha contribuido "de modo constante, efectivo y generoso" a luchar contra el terrorismo, "teniendo siempre a las víctimas como norte y como fin" de su solidaridad.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y sus tres últimos antecesores en el cargo -José Luis Rodríguez Zapatero, José María Aznar y Felipe González- han presenciado desde la primera fila esta solemne ceremonia, celebrada en el Salón de Columnas del Palacio Real tras una entrevista a solas entre don Juan Carlos y Sarkozy que ha durado una media hora.
La reina y los príncipes de Asturias acompañaban al rey en la entrega de esta distinción al presidente francés, a la que han asistido también los ministros españoles de Asuntos Exteriores e Interior junto al titular francés de Interior, Claude Güeant, así como los presidentes del Congreso, del Senado, del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo y el CGPJ.
Después de agradecer al rey que le haya otorgado una distinción tan prestigiosa, en nombre de la "profunda" amistad entre Francia y España, que ha trascendido desavenencias e incomprensiones, Sarkozy ha mostrado su orgullo por ayudar al pueblo español a defender la libertad frente al terrorismo y a erradicar sus "abyectas manifestaciones", como el asesinato, el chantaje y la extorsión.
Así, ha explicado que, al recibir el Toisón, se solidariza con las "numerosas víctimas de decenios de violencia", por lo que ha reafirmado su voluntad de no escatimar esfuerzos para ayudar a España a clausurar definitivamente "el capítulo sangrante del terrorismo de ETA".
En este contexto, ha recordado su colaboración en este terreno con Aznar y con Rodríguez Zapatero, antes de dirigirse a Rajoy y a su antecesor para recordar la pertenencia de España al G20 y recalcar que este país "es uno de los grandes de Europa", una nación que Francia "admira" y la UE necesita para salir de la crisis.
Minutos antes, en la misma sala que acogió hace más de 25 años la firma de la adhesión española a la UE, el rey ha hecho valer la importancia de la cooperación hispano-francesa para el futuro de la Unión y ha resaltado que, "unas veces rivales, otras aliadas", España y Francia son hoy sociedades hermanas que luchan juntas por el progreso de una Europa solidaria "que afronta la crisis con resolución".
Don Juan Carlos ha elogiado el "destacado papel" de Sarkozy al afrontar "grandes desafíos" internacionales, así como su "altura de miras y capacidad para la acción", y ha asegurado que las relaciones hispano-francesas atraviesan "uno de los mejores momentos", gracias "en gran medida" al "gran amigo de España" que es el actual presidente francés.
El rey ha querido aprovechar además su entrevista con Sarkozy para presentarle a uno de los integrantes de la Guardia Real que, en septiembre del año pasado, como capitán de la Infantería de Marina, contribuyó decisivamente a la liberación de la ciudadana francesa Evelyne Colombo, secuestrada en aguas próximas a Somalia.
Entre los cerca de 50 invitados a esta ceremonia y al almuerzo posterior celebrado en el Comedor de Diario del palacio -al que Felipe González ha excusado su ausencia- se encontraban cinco de los galardonados con el Toisón de Oro por el rey: Javier Solana, Víctor García de la Concha, el infante don Carlos, Simeón de Bulgaria y Constantino de Grecia.
Rajoy, Rodríguez Zapatero y Aznar han tenido ocasión de intercambiar impresiones, en tono distendido, tras el acto de entrega del Toisón, al que también ha acudido Adolfo Suárez Illana, en representación de su padre, el primer presidente del Gobierno de la democracia.