A Carlos Matallanas le diagnosticaron ELA hace seis años. Una enfermedad que le tiene paralizado, tetrapléjico desde hace ya más de tres años. Vive porque en enero de 2015 se puso una sonda para alimentarse por el estómago y porque en junio de 2016 le practicaron una traqueotomía para respirar ayudado por un respirador.
Matallanas lucha contra una enfermedad asesina y "contra el total abandono en que nos encontramos los enfermos como yo. Agrandado por la pandemia", señala en su cuenta de Twitter @CMatallanas15.
Carlos Matallanas denuncia en las redes sociales que los gastos en material sanitario pasan de 150 euros al mes a 500 en la compra de gaseas estériles y guantes.
Una situación que se agravó durante el confinamiento por la pandemia del coronavirus.
Finaliza pidiendo al Estado que ponga una solución para unos enfermos del ELA, que deben sufragar todos estos gastos extras de su bolsillo.
"No pido caridad, sino justicia social. El Estado tiene una cuenta pendiente con enfermedades como la mía". concluye Carlos Matallanas.