La Audiencia de Gerona ha condenado a 41 años de prisión a Josep C., el monitor de Lloret de Mar que reconoció durante el juicio celebrado hace dos semanas haber abusado sexualmente, entre el 2011 y el 2012, de 17 niños de entre 4 y 9 años.
La sentencia también establece que el tiempo de cumplimiento de condena será de 16 años y medio, teniendo en cuenta que en caso de condena por diversos delitos la ley contempla como tope de años el triple de la pena mayor impuesta, que en este caso es de 5 años y medio.
La sentencia de la sección tercera, de la que ha sido ponente el magistrado Ildefons Carol, considera probados todos los abusos relatados por las acusaciones durante la vista oral y reconocidos por el procesado.
La fiscal solicitaba para el pederasta confeso 105 años de cárcel, y finalmente la resolución del Alto Tribunal gerundense le rebaja en un grado la pena porque le reconoce dos atenuantes simples, el de confesión y el de alteración psíquica.
Además de la pena de cárcel, la sentencia le impone la medida de libertad vigilada durante los 10 años siguientes a su excarcelación, cuando no se podrá acercar a menos de 500 metros de las víctimas, en seis años no podrá trabajar en nada relacionado con menores y además deberá indemnizar a cada uno de ellos con 6.000 euros.