(Actualizado

La valoración que los españoles hacen del sistema sanitario actual es de 6 sobre 10. Superado el momento crítico de la pandemia, ocho de cada diez pacientes tienen que esperar más de 9 días para ser atendidos por su médico de familia. Son datos del informe del Sistema Nacional de Salud 2023 donde se refleja un alto índice de problemas de salud mental que padece hasta el 34% de la población.

Así, el 56,7% de los españoles piensa que el Sistema Nacional de Salud (SNS) funciona bien o bastante bien mientras que el 14,3% opina que necesita cambios profundos, según el informe anual sobre el estado de salud de la población española y del SNS, que hizo público este lunes el Ministerio de Sanidad.

El gasto en consumo durante el Orgullo de Madrid aumentó un 7,8% respecto a 2023

La valoración de los españoles sobre su SNS es de 6,27 puntos sobre 10, si bien se observa un descenso respecto a los años anteriores a la pandemia por Covid-19 (6,74 en 2019).

Los dispositivos del 061/112 y la hospitalización son los servicios mejor valorados por la ciudadanía, con 7,4 y 7,2 puntos sobre 10 respectivamente. Atención Primaria se valora con 6,37 y la consulta de especializada con 6,04 puntos.

Un 40,5% de quienes han utilizado los diferentes servicios opina que la comunicación y coordinación entre Atención Primaria y especializada es buena y el 24% que es mala, lo que señala uno de los retos importantes que tiene el SNS.

La Comunidad de Madrid sitúa a seis hospitales como centros de referencia europea en Oncología

CAUSAS DE MUERTE

Las principales causas de mortalidad siguen siendo las enfermedades cardiovasculares y el cáncer, que están detrás de más del 50% de las defunciones, si bien estas causas mantienen la tendencia descendente que vienen mostrando en la serie histórica.

La cardiopatía isquémica desde 2012 ha pasado de representar 76,7 muertes por 100.000 habitantes a 53,3 en 2022. La enfermedad cerebrovascular ha descendido de 64,2 a 44,0 muertes por 1.000 habitantes.

SUICIDIO

El 34% de la población padece algún problema de salud mental, siendo los más frecuentes los trastornos de ansiedad, los del sueño y los depresivos.

Pacientes con cáncer de mama metastásico trasladan a la ministra de Sanidad que su "tiempo se acaba"

Respecto a la ansiedad afecta al 10% de la población general, el doble a las mujeres (14%) que a los hombres (7%), también los padecen el 3% de los menores de 25 años.

Entre las causas externas, la mortalidad por suicidio supone 8,8 muertes por cada 100.000 habitantes, siendo mayor en hombres que en mujeres en todos los grupos de edad. La mayor tasa y diferencia entre sexos se sitúa en los 85 y más años: 45,4 muertes por cada 100.000 hombres frente a 6,2 por cada 100.000 mujeres.

OBESIDAD

El informe señala que dos de cada 10 personas adultas presentan obesidad y cuatro de cada 10 se declaran sedentarias en su tiempo libre. El consumo de frutas y /o verduras es insuficiente solo en dos de cada diez personas. A menor nivel educativo mayor prevalencia de obesidad y de sedentarismo, este último más extendido también entre las mujeres.

Realizado en España el primer trasplante de venas personalizadas

El porcentaje de fumadores diarios es del 19,8% y el consumo medio per cápita de alcohol puro registrado en adultos es de 10,5 litros al año. El 11,9% de los jóvenes de 15 a 24 años refiere al menos un episodio mensual de consumo intensivo de alcohol. Dos de cada 10 estudiantes de entre 14 y 18 años han consumido cánnabis en el último año, más los chicos que las chicas, y el 5,1% presenta un posible trastorno por uso de videojuegos.

GASTO SANITARIO

El gasto sanitario público se situó en 94.694 millones de euros (2.001 euros por habitante) en el año 2022, alcanzando un 7,8% del PIB y suponiendo el 71,7% del gasto sanitario total (131.984 millones de euros). El incremento en los 5 últimos años fue del 27,3%. Los servicios de asistencia curativa y de rehabilitación absorben la mayor parte del gasto sanitario público (57,2%).

El gasto sanitario privado representó un 3,1% del PIB. El 73,0% del mismo lo absorben los pagos directos de los hogares, que se destinan, fundamentalmente, al copago de las recetas del SNS, productos farmacéuticos de venta libre, dispositivos terapéuticos como gafas, audífonos y otros, así como a la atención dental y otra asistencia curativa y rehabilitadora