El cadáver de la mujer hallado ayer domingo en un pozo de riego de Jerez de la Frontera (Cádiz) estaba desmembrado, según han indicado a EFE fuentes próximas a la investigación. Los investigadores creen que la violencia de género no es, en principio, la principal hipótesis sobre el caso, han indicado a EFE otras fuentes próximas al caso.
El hombre que fue detenido ayer tras el hallazgo del cuerpo por su presunta implicación en la muerte no es pareja de la mujer, según las fuentes. El arrestado permanece en la comisaría de Jerez, mientras que los restos de la mujer continúan en el Instituto de Medicina Legal de Cádiz, a donde fueron trasladados para su identificación y para la realización de las pruebas que determinen las causas y circunstancias en las que murió.
Según publica el Diario de Jerez, el cuerpo estaba "tapado con escombros" y fue localizado gracias a que la Policía seguía desde hace días los movimientos del detenido. El juzgado que instruye las diligencias mantiene decretado el secreto de sumario.
El cuerpo fue hallado ayer a gran profundidad en un pozo agrícola del paraje conocido como Cortijo de Ducha, en una zona rural de Jerez de la Frontera, gracias a un amplio dispositivo policial en el que participaron especialistas de la Unidad de Subsuelo, Policía Científica y Unidad de Medios Aéreos.
Las pesquisas las desarrollan agentes de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV), con sede en Madrid, con apoyo de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Jerez de la Frontera