España sigue avanzando a un menor ritmo que en otros países europeos en oferta de vivienda en alquiler, según un informe realizado por Atlas Real Estate Analytics, que ha calculado que el país necesita aumentar en casi 2 millones de viviendas su oferta de alquiler para igualarse a Europa.
En concreto, requiere la construcción o la puesta en alquiler de 1,83 millones de viviendas adicionales, principalmente en regiones como Andalucía (447.139), Comunidad Valenciana (252.683) o Galicia (180.566), mientras que otras comunidades como Madrid (97.745) o Barcelona (94.952) se encuentran en posiciones intermedias.
El mercado build to rent (BtR), que lo conforman las casas que se construyen específicamente para alquilarse, pretende dar respuesta a esas necesidades, si bien los proyectos actualmente en marcha solo alcanzan las 97.787 viviendas en todo el país.
Esta cifra ha crecido un 15% en el último año, gracias al interés inversor por este tipo de proyectos, al impulso que le están dando las grandes promotoras y, principalmente, a la contribución pública --especialmente el Plan Nacional de Vivienda Asequible--, que impulsa 58.711 de esas viviendas, con el sector privado concentrando las otras 39.076 unidades.
Por el lado privado, el incremento se limita al 9% debido al contexto macroeconómico general adverso y a un aumento de la mortalidad de los proyectos en la recta final del año, a causa del endurecimiento de la financiación por el alza de los tipos de interés.
SOLO UN 8,5% POR DEBAJO DE MERCADO
Desde 2020, en el mercado BtR se han transaccionado más de 6.500 viviendas por un valor total superior a los 750 millones de euros. El informe concluye que el impulso a la vivienda en alquiler, especialmente al segmento asequible, es necesario en España, ya que solo el 8,5% de los hogares habita en vivienda alquilada por debajo del precio de mercado, una cifra inferior a la media de la Unión Europea (9,8%).
Al mismo tiempo, la escasa oferta actual en el mercado cuenta con un precio mediano de 1.190 euros al mes, lo que supone un incremento del 8,18% sobre el alquiler particular de cada mercado.
El BtR puede dar una solución a estas necesidades, siendo además más eficiente medioambientalmente que el parque de alquiler tradicional. En concreto, casi un 60% del BtR comercializado dispone de un certificado energético A o B, que contrasta con el 9% equivalente en el mercado de alquiler particular.
No obstante, el sector también ha atravesado un 2022 difícil, en el que los costes para la promoción de proyectos se han incrementando un 18,5% desde el estallido de la pandemia, sobre todo en la partida de la electricidad, que se disparó un 21%.
Entre las grandes promotoras, destaca Aedas Homes en primer lugar, al concentrar el 16,1% de la cartera total de proyectos BtR, seguida de Neinor Homes (12,8), Kronos (11,8%), Vía Célere (6,9%), AQ Acentor (5,7%) y Culmia (5,5%).