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Con consignas como "enfermos mentales fuera de la cárcel" o "alternativa a la cárcel, centros especializados", un centenar de personas se han manifestado hoy en Madrid en la víspera del Día Mundial de la Salud Mental para reivindicar los derechos de los enfermos mentales encarcelados en España.

"Para un enfermo mental la cárcel no es su sitio, lo que pedimos son centros especializados para todas las personas que hay, que hay miles en nuestras cárceles con enfermedad mental; personas que han cometido un delito y los jueces sólo ven delito y cárcel, y eso no puede ser", ha contado Jose Manuel Dolader, coordinador de esta marcha que ha cifrado en 12.000 estos casos.

Convocada por la Asociación "El timón de Almería", la Federación de asociaciones de familiares y personas con enfermedad mental y la Confederación Salud Mental España, la marcha ha transcurrido desde la plaza de España hasta la Puerta del Sol también con el objetivo de dar "visibilidad" al total de enfermos mentales que hay en España, alrededor de 400.000, según los datos ofrecidos por Dolader.

"Queremos que la gente sepa que somos gente normal, que las familias de estos enfermos somos gente normal y que tenemos derecho a que estas personas tengan derecho a trabajar, porque solamente el 10 % de este colectivo está trabajando", ha matizado.

Según el manifiesto de esta convocatoria, un enfermo mental en la cárcel, "alejado del medio familiar, con recortes de fármacos y con el sistema de sanidad penitenciaria y no la del Sistema Nacional de Salud no se rehabilita".

En este sentido, y como "alternativa", los asistentes han pedido "alternativas" como las Comunidades Terapéuticas Provinciales, que son centros residenciales en el ámbito socio sanitario donde se "combina" el tratamiento psiquiátrico con programas de rehabilitación y reinserción social.

En la actualidad España invierte en salud mental 5,5 euros por cada 100 que destina al gasto total sanitario, una cifra inferior a la media de la UE, que alcanza los siete euros, lo que origina falta de recursos y repercute en las personas con trastorno mental, quienes no tienen cubiertas varias de sus necesidades.

Además, en nuestro país una de cada cuatro personas tendrá algún trastorno mental a lo largo de la vida y, en la actualidad, los más frecuentes son los menos graves, como la ansiedad o los relacionados con la afectividad.