Gisèle Pelicot afirmó este martes ante los 51 hombres acusados de haberla violado durante los casi diez años en que su marido la drogaba para poder abusar de ella inconsciente que "la cicatriz no se cerrará nunca".
"He perdido diez años de mi vida que nunca recuperaré", subrayó Gisèle Pelicot, que recordó que ahora tiene 72, en la que debe ser su última declaración ante el Tribunal de lo Criminal de Aviñón (sureste de Francia).
Explicó que desde que empezó el procedimiento judicial ha escuchado "cosas inaudibles, inaceptables", y que cuando tomó conciencia renunció a que el juicio se hiciera a puerta cerrada, como era su derecho, aunque "sabía a lo que me exponía".