La portavoz del Gobierno Vasco, Idoia Mendia, ha descartado hoy que se esté pensando en legalizar el cannabis en Euskadi, porque el Ejecutivo autonómico no es competente en esta materia y el tráfico y consumo de esta sustancia está prohibido por el Código Penal.
Preguntada en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal Consejo de Gobierno, Mendia ha aclarado que la consejería vasca de Sanidad sólo pretende estudiar la legislación vigente en la comunidad autónoma y consensuar con las asociaciones que utilizan esta sustancia "cómo se puede regular mejor el consumo, venta y cultivo" de cannabis.
Mendia ha subrayado que se trata de involucrar a las asociaciones que defienden el uso de esta sustancia (unas 40 legalizadas en el País Vasco) en una reforma legal para llegar al objetivo último de "evitar las adicciones".
El Gobierno Vasco "no se plantea legalizar el cannabis porque la competencia de estas cuestiones es del Estado", ha subrayado.
El Código Penal "establece lo que establece", y el Gobierno Vasco no va a modificarlo porque no tiene competencias en este tema, ha señalado la portavoz, quien ha subrayado que la intención de la reforma anunciada ayer por el viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández, es mejorar la regulación para no aumentar el número de drogodependientes.
La portavoz del Gobierno Vasco ha mediado hoy en la polémica que han generado las declaraciones realizadas ayer por Fernández, quien anunció que la nueva Ley de Adicciones vasca contemplaría una regulación menos "prohibicionista" del consumo, venta y cultivo del cannabis.
Fernández explicó en rueda de prensa que el espíritu de la nueva ley se basaría en "dejar un cierto espacio a la autonomía personal" en la regulación de la venta, consumo y cultivo de cannabis, siempre y cuando se garantizara a los ciudadanos una información completa sobre las consecuencias de los consumos y un "respeto absoluto" al derecho a la salud de las personas.
El viceconsejero justificó la nueva regulación en la necesidad de llenar vacíos legales existentes bajo el criterio de que "es mejor ordenar que prohibir las conductas que existen ya consolidadas en la sociedad".
Las leyes que sólo usan la prohibición "sin más" está demostrado que inducen a la clandestinidad, la delincuencia y los mercados negros, dijo Fernández.
Mendia ha aclarado hoy que el objetivo de Sanidad no es ser "más permisivo", sino dejar constancia de que "con la prohibición estricta no se consigue lo que se busca", que en este caso es evitar las drogodependencias.