La organización ecologista WWF ha alertado hoy, con motivo de la celebración del Día Mundial de los Océanos, de la contaminación por plásticos que sufren los cetáceos en el Mediterráneo. WWF ha elaborado un informe tras analizar biopsias de casi 100 mamíferos marinos pertenecientes a tres especies de ballenas que viven en el Santuario de Pélagos, el área marina protegida más grande del Mediterráneo, ubicada entre Italia, Francia y Mónaco.
El estudio muestra una alta contaminación de los cetáceos debido a los ftalatos, un componente de los plásticos que se encuentra en embalajes, cortinas de baño, cables, barnices, medicamentos o pinturas.
Los ftalatos son considerados tóxicos para los seres humanos y los animales, con posibles efectos nocivos sobre la fertilidad y el desarrollo del feto, ha recordado WWF, y ha observado que se trata de trata de disruptores endocrinos y que algunos de ellos están clasificados como cancerígenos.
Según los datos de esta organización, cada día entran en el océano entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas de plástico, y el 93 por ciento de ellas proceden del consumo. Bajo el efecto del sol y las olas, el plástico se convierte en partículas más pequeñas (microplásticos) que tardan varios siglos en desintegrarse.
El mar Mediterráneo, según WWF, está clasificado como la sexta región más alta en acumulación de desechos plásticos en el planeta, con una estimación de entre 1.000 y 3.000 toneladas de plástico. El líder de la Iniciativa Marina Mediterránea de WWF, Giuseppe Di Carlo, ha señalado que el mar Mediterráneo "es asfixiado todos los días por la pintura, los productos cosméticos y las bolsas de plástico".
En una nota de prensa, Di Carlo ha alertado que la sociedad produce toneladas de plásticos "con efectos irreversibles en nuestros océanos" y ha instado a los consumidores, a la industria, los gobiernos y las ciudades costeras a eliminar el uso de plástico, así como a recoger y reciclar los residuos.