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La Policía Nacional ha intervenido en España y Portugal más de 20 toneladas de artículos textiles falsificados, principalmente zapatillas, que estaban preparadas para ser distribuidas por una organización criminal que obtuvo más de 6 millones de euros de beneficios vendiendo productos fraudulentos.

En la bautizada como operación 'Magda-Love', realizada forma conjunta con la Guardia Nacional Republicana de Portugal y Europol, los agentes han detenido a siete personas en España y han investigado a otras diez en territorio portugués.

Según ha informado la Dirección General de la Policía, en los 23 registros practicados -seis en España y 17 en Portugal- han intervenido un total de 34.436 artículos falsificados y 507.000 euros en efectivo, 12 vehículos, una pistola y maquinaria para fabricar los productos falsos.

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La investigación se inició hace más de un año, cuando los agentes detectaron numerosos perfiles en redes sociales en los que se ofertaban miles de zapatillas fraudulentas.

Descubrieron que detrás de ellos estaba un grupo criminal, cuyos miembros contactaban y se desplazaban de forma recurrente al norte de Portugal, donde ordenaban la fabricación bajo pedido de los artículos.

Una vez elaborados eran remitidos a la provincia de Alicante mediante una agencia de paquetería, la misma que empleaban para hacer llegar los pedidos a sus clientes.

A través de Europol los agentes lograron identificar hasta 17 centros de fabricación clandestina de las zapatillas, así como varias naves en las que almacenaban la mercancía.

De forma paralela abrieron una investigación económica en torno al encubrimiento y ocultamiento de los beneficios obtenidos ilícitamente, que calculan que superan los 6 millones de euros.

Todo ese dinero lo reinvertían en la compra de propiedades y en la creación de empresas, una dedicada a la compra y alquiler de viviendas en Madrid, ciudad en la que vivía uno de los investigados en la trama.

Este hombre contaba con un estudio propio para la maquetación de las prendas y publicaba sus diseños en redes sociales, además de los productos falsos.

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Fue el pasado martes cuando los agentes dieron por finalizada la investigación y llevaron a cabo los 23 registros, entre ellos cuatro en la provincia de Alicante y dos en Madrid.

Ahí intervinieron 12.300 artículos falsificados, menos de la mitad del total.

Los investigadores han logrado bloquear las cuentas bancarias, las redes sociales y las fincas de los supuestos implicados, a quienes se imputan delitos de pertenencia a organización criminal, contra la propiedad industrial y blanqueo de capitales.

Esta intervención coincide con la celebración del Día Mundial contra la Falsificación y la Piratería que se conmemora el próximo 8 de junio.