El próximo pleno del Gobierno valenciano aprobará conceder la Distinción de la Generalitat a Julián García Antón, el conserje del bloque residencial de València que el pasado 22 de febrero quedó calcinado por un incendio que dejó diez víctimas mortales pero cuya labor fue clave para salvar a muchos vecinos.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y la alcaldesa de València, María José Catalá, han acordado reconocer al portero "por su comportamiento ejemplar y arriesgado" durante la tarde del jueves de la semana pasada, cuando se produjo el incendio de los edificios residenciales del barrio de Campanar, ha anunciado el Consell.
Según el Decreto por el que se creó la Distinción de la Generalitat, podrán recibir este galardón “de modo colectivo o individual quienes salven personas en grave riesgo como consecuencia de catástrofe o de cualquier otra situación, o bien colaboren de modo determinante en el restablecimiento de la normalidad en zonas siniestradas, así como a aquellas personas, tanto físicas como jurídicas, que hayan destacado por sus valores de convivencia, humanismo, compromiso con la solidaridad y ayuda a los demás”.
Asimismo, el pleno del Consell reconocerá de manera especial "el trabajo realizado por todos los profesionales que intervinieron en el trágico suceso y que realizaron un trabajo diligente y encomiable".