La reserva hídrica española ascendió este martes a un 35,6% de su capacidad total, lo que supone el mayor ascenso semanal de agua embalsada desde finales del pasado mes de enero gracias a un tren de borrascas atlánticas, entre ellas Aline y Bernard.
Los embalses almacenan actualmente 19.945 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, 577 más respecto de la semana pasada, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Ese ascenso se produce después de que las precipitaciones de los últimos siete días afectaran considerablemente a toda la península, con el valor máximo en Vigo, donde se recogieron 233,7 litros por metro cuadrado.
Se trata de la mayor subida de agua en los embalses españoles desde la última semana de enero, que entonces fue de 1.343 hm3. Además, supone dejar atrás casi siete meses de descensos semanales casi consecutivos, iniciados a finales de marzo y solo interrumpidos por una breve subida a mediados de junio.
La serie histórica de Transición Ecológica, a la que tuvo acceso Servimedia, indica que la actual reserva de agua embalsada es la segunda más baja desde 1995 en la 43ª semana del año, solo por delante de la de 2022 (31,8%). En cambio, el nivel más alto desde entonces en esta época se produjo en 2013 (65,6%). Esta situación se mantiene desde mediados del pasado mes de junio.
Los niveles más altos de agua en la actualidad corresponden al Cantábrico Oriental (75,3%), el Cantábrico Occidental (71,2%), las cuencas internas del País Vasco (66,7%), Galicia Costa (62,1%), el Miño-Sil (57,1%) y Tinto, Odiel y Piedras (55,9%).
Por debajo del 50% están el Tajo (47,6%), el Júcar (46,8%), el Duero (42,7%), el Ebro (34,7%), el Guadiana (24,3%), el Segura (22,3%), la cuenca mediterránea andaluza (22,2%), las cuencas internas de Cataluña (19,9%), el Guadalquivir (18,4%) y el Guadalete-Barbate (15,1%).