A principios del mes de octubre, una macroplaga de chinches desató todas las armas en París cuando, de una semana para otra, estos bichos comenzaron a aparecer en los asientos del transporte público, butacas de cines y teatros, y todo tipo de materiales como ropas, maletas, colchones, gritas de paredes, suelos, falsos techos, armazones de cama, cortinas, alfombras, etc.
Estos insectos, de unos 5 milímetros de longitud son marrones y ovalados, tienen tres pares de patas y no tienen alas, pero se caracterizan por ser muy rápidos moviéndose. Las hembras ponen hasta tres huevos al día y los insectos no sobreviven a temperaturas de más de 45 grados ni de menos de 0 grados.
La preocupación se ha elevado en las últimas semanas en las ciudades que tienen conexiones diarias con París. Además, con el paso de los años, estas diminutas pero irritantes criaturas han desarrollado una mayor resistencia a los químicos e insecticidas, lo que complica su eliminación sin la ayuda de profesionales en el control de plagas.
Aunque la picadura de un chinche no suele representar un peligro, sus consecuencias pueden abarcar desde erupciones hasta molestias y picazón. La última afectada en viralizarse ha sido una bailarina que ha descubierto su cuerpo lleno de picaduras en Zaragoza.
La joven ha compartido vídeos mostrando cómo quedó su cuerpo tras dormir en un hotel de la ciudad y ha contado que tuvo que ir al hospital ante el gran picor y molestias generadas. Los expertos en control de plagas recuerdan que “nadie está a salvo” y que “es crucial abordar su control lo más pronto posible debido a su rápida reproducción”.
Estas criaturas se nutren de sangre humana, por lo que encuentran en camas y sofás sus refugios predilectos. Sin embargo, es importante destacar que también se ocultan en enchufes, rodapiés, cuadros y otros lugares. Son de hábitos nocturnos y su actividad principal se desarrolla durante la noche. ¿Cómo detectarlas? Para detectar la presencia de chinches en los lugares donde suelen anidar, es importante observar lo siguiente:
- Buscar chinches adultos, ya sean vivos o muertos.
- Identificar la presencia de huevos, ninfas o las mudas de color café claro.
- Inspeccionar manchas puntiformes de color marrón, que pueden variar hacia tonos rojizos, que podrían ser excrementos del insecto o manchas de sangre.
- Otro signo evidente de la presencia de chinches son las picaduras que causan
¿Cómo son las picaduras de chinche?
Las picaduras de chinches se caracterizan por aparecer en áreas de la piel expuesta, como piernas, brazos y manos, en forma de manchas rojas o bultos con una zona central descolorida. A diferencia de las picaduras de pulgas, no suelen presentar un centro rojizo. A menudo, las chinches pican repetidamente en diversas zonas de la piel.
Estas picaduras ocurren principalmente durante la noche y, en un primer momento, pueden pasar desapercibidas. Sin embargo, en un período que va de 1 a 24 horas después de la picadura, es común experimentar una reacción alérgica que se manifiesta con irritación, picazón y una sensación de quemazón.
Es importante evitar rascarse las picaduras, ya que el rascado puede introducir agentes infecciosos en la herida. En casos leves, se recomienda lavar la zona de la picadura con agua y jabón, y si la picazón es intensa, se puede aplicar una loción calmante.
Cuando la picazón es insoportable, persistente o aparecen signos de infección, se aconseja buscar atención médica de inmediato.¿Cómo prevenirlas en nuestro hogar? Para prevenir la presencia y propagación de chinches, se pueden tomar las siguientes medidas:
- Realizar una limpieza diaria de las áreas y superficies expuestas.
- Aspirar diariamente suelos, paredes, muebles, colchones y armazones de cama, asegurándose de sellar y desechar la bolsa del aspirador inmediatamente después.
- Emplear una vaporeta en lugares posibles de anidamiento, ya que temperaturas superiores a 45°C eliminan a estos insectos.
- Sellar grietas y hendiduras en paredes, suelos y techos, así como entre paredes y rodapiés o jambas de puertas y ventanas. Evitar hacer agujeros innecesarios en las paredes.
- Utilizar pintura de color claro en las paredes y techos en lugar de papel tapiz.
- Reducir la presencia de moquetas, alfombras, sofás y sillas tapizadas, cuadros y pósters en las paredes en la medida de lo posible.
- Optar por camas y cabeceros metálicos en lugar de madera. Cubrir los colchones con fundas herméticas de costuras selladas. Evitar almacenar objetos debajo de las camas o decorarlas con cojines y canapés.
- Mantener los muebles, mesillas, taquillas y similares en buen estado y limpios.
- Revisar y mantener en buen estado los puntos de electricidad, conexiones de TV y teléfono.
- Utilizar perchas o ganchos para colgar la ropa en lugar de dejarla en el suelo o sobre la cama.
- No dejar maletas, mochilas o equipaje cerca de la cama.
- Lavar toda la ropa de calle, de cama, cortinas, cojines y textiles en agua caliente a 60-70°C y/o utilizar la secadora.
- Facilitar a los usuarios la posibilidad de lavar y desinfectar su ropa y artículos personales.
Estas medidas ayudarán a prevenir la aparición y propagación de chinches, manteniendo un entorno más limpio y seguro.