Las fuertes tormentas solares que azotan Marte fueron la causa de la pérdida de su atmósfera, lo que forzó la desaparición del agua y el clima habitable del planeta rojo, revelaron hoy los científicos de la NASA. "Buscamos agua y la encontramos, pero si miras a Marte hoy, es un planeta frío, seco y desértico", afirmó en rueda de prensa Michael Meyer, líder del Programa de Exploración de Marte de la NASA.
En la actualidad, la superficie de Marte está a una temperatura inferior a 60 grados bajo cero de media, pero en los polos puede llegar en invierno a menos 125 grados Centígrados. Los nuevos hallazgos de la Misión de Evolución Volátil y Atmosférica de Marte (Maven) de la NASA apuntan a que Marte sufre el bombardeo de partículas solares que erosionan la atmósfera alta a un ritmo de cerca de diez libras (4,5 kilos) por segundo, un factor que es entre 10 y 20 más veces mayor que el habitual.
La atmósfera actual de Marte cuenta con apenas un 1 % de la densidad de la Tierra. "Lo que esto nos dice es que la pérdida a través del espacio ha sido un proceso importante", indicó Bruce M. Jakosky, científico del Laboratorio de Física Espacial y Atmosférica de la Universidad de Colorado y investigador principal de la misión Maven en rueda de prensa.
Jakosky comparó el proceso del viento solar que azota Marte a lo que le ocurre a una persona cuando sale de la ducha a la brisa, y ésta le elimina el agua del pelo. "Creo que estamos ante las primeras pruebas contundentes de que el escape de gases hacia el espacio fue el actor principal del cambio climático que sufrió Marte en el pasado", agregó.
Uno de los objetivos de los más de 125 investigadores que forman parte de la misión de la NASA es averiguar qué gases y qué cantidad de los mismos escaparon hacia el espacio desde la atmósfera marciana y cuándo ocurrió eso.
Según los científicos de la NASA, hace miles de millones de años, en sus orígenes, el sol era mucho más activo e inestable y provocaba numerosas tormentas solares que pueden ser el motivo de que Marte, mucho más expuestos que la Tierra a estos fenómenos, pasase de ser un planeta cálido y húmedo al actual lugar gélido y desierto que es ahora.
La Tierra cuenta con campos magnéticos que protegen de estas tormentas solares, mientras que Marte no cuenta con esa protección. Asimismo, la misión Maven también registró auroras ultravioletas en la atmósfera de Marte.
La sonda espacial Maven, lanzada el 18 de noviembre de 2013 para resolver el misterio de cómo el planeta rojo perdió la mayor parte de su atmósfera y de su masa de agua, entró en la órbita de Marte el pasado mes de septiembre y debe completar una misión de un año.
Los datos de Maven tratan de complementar los aportados por el robot explorador Curiosity, que lleva en el planeta desde 2012, y que revelan que el monte Sharp de Marte, situado dentro del cráter Gale, podría estar formado por los sedimentos depositados en el lecho de un lago hace millones de años.
En sus primeros doce meses, el robot descubrió este antiguo lecho de curso de agua y recogió muestras de suelo y la atmósfera suficientes como para que los científicos concluyan que puede haber habido vida allí hace miles de millones de años.En julio de 2013, Curiosity concluyó su investigación en el área conocida como bahía de Yellowknife y emprendió viaje con rumbo al suroeste hacia la base del monte Sharp, adonde llegó en septiembre de 2014.