Cada año se desperdician en nuestro país 7,7 millones de toneladas de comida.Para evitarlo han surgido iniciativas como "Ni las Migas". Una plataforma para poner en contacto a restaurantes, tiendas o panaderías con potenciales clientes. Todos ganan y se evita el desperdicio.
Un grupo de jóvenes han creado la aplicación "Ni las Migas". Una plataforma a través de internet que pone en contacto a 45 establecimientos ( desde restaurantes, a pastelerías o establecimientos ecológicos donde se vende la lehce que caduca al día siguiente) con potenciales clientes que a última hora del día pueden conseguir a mitad de precio los productos que de otro modo se derrocharían. Lo aprovechan todo. Incluso convierten en pan rallado, el pan duro.
En España se derrochan anualmente 7,7 millones de toneladas de alimentos, la mayoría se produce en el hogar: 2,9 millones de toneladas. Los que más, los hombres jóvenes que viven solos. Otras empresas como KFC donan lo que les sobra a entidades sin ánimo de lucro.
'Ni Las Migas' es un proyecto que nace finales de 2016 con el objetivo de reducir el impacto del desperdicio alimentario. A través de una aplicación móvil que, basada en la geolocalización, pone en contacto a clientes con establecimientos que tienen comida en perfecto estado que no ha encontrado consumidor final. Mediante el móvil, los usuarios, también conocidos como “migueros”, reservan los productos a un precio menor que después recogen en los locales a la hora indicada, ahorrando y ayudando a reducir el excedente.
Con el objetivo de ser una empresa referente en la lucha contra el desperdicio de comida a través de las nuevas tecnologías, queremos continuar ofreciendo soluciones integrales y contribuir a un consumo alimentario más sostenible.
La comunidad Ni Las Migas, a través de la colaboración con diversas iniciativas y proyectos, pretende concienciar y sensibilizar sobre el desperdicio alimentario. Tienen el objetivo de actuar como un agente de cambio para promover una sociedad implicada en la sostenibilidad de nuestras ciudades.
Según la FAO, un cuarto de las pérdidas y el desperdicio de alimentos de hoy en día, sería suficiente para alimentar a 870 millones de personas hambrienta. Otro de los datos pone en evidencia que un tercio de todo lo que producimos (1300 millones de toneladas al año) se desperdicia.
