Estamos acostumbrados a historias espeluznantes y sucesos terroríficos en México, pero lo ocurrido en el barrio de Iztapalapa de la capital mexicana roza los límites de lo imaginable. La policía del D.F. ha detenido a un individuo de 32 años, taxista de profesión, que durante los últimos 7 años ha retenido a dos menores de edad. Las conoció tras hacerse novio de la conserje de un colegio del barrio. Convenció a ésta, su madre, para que se fueran a vivir con él a una casa propiedad de su familia, y allí las encerró durante todo este tiempo.
Lo relatado por las autoridades judiciales de México es una historia tan estremecedora como espeluznante. En estos años el acusado, Jorge Iniestra, las sometió a palizas y maltratos continuos, además de violaciones de las que, en estos años, nacieron 5 niños. El "Monstruo de Iztapalapa", como ya se le conoce, acabó matando a una de las menores y a su hija recién nacida. Las dejó muertas dentro de la casa durante todo un mes, en el mismo cuarto donde la otra joven y el resto de los niños estaban atrapados. Luego metió los cuerpos descompuestos en una bolsa, que dejó abandonada en una autopista.
En la rueda de prensa posterior a su detención, el acusado no mostró ni un atisbo de humanidad. Incluso rió al ver cómo una de sus hermanas increpaba a la madre de las dos menores. La familia del agresor, y él mismo, sostienen que la madre de las víctimas conocía todo lo que estaba pasando. De hecho la policía mexicana ha podido comprobar cómo el acusado recibía dinero de la madre, que finalmente, tras siete años guardando silencio, decidió denunciar los hechos. La policía del D.F. le acusa de complicidad y encubrimiento.