La Policía rumana trasladó a Sergio Morate, sospechoso del crimen de Cuenca, al aeropuerto de Timisoara, donde las autoridades españolas lo esperaron para llevarlo en avión a España.
En España, a Morate le espera un juicio por haber supuestamente asesinado a las jóvenes Laura del Hoyo y Marina Okarynska.
"El ciudadano español, sospechoso de asesinato, será entregado esta noche a las autoridades españolas", explicó a Efe Ancuta Morariu, portavoz de la comisaría de Timisoara, ciudad en el oeste de Rumanía donde el acusado se halla en arresto preventivo desde su detención en Rumanía, el pasado 13 de agosto.
De esta manera, se pone fin a los trámites de extradición de Morate después de que fuera detenido por una unidad especial de la Policía rumana en Lugoj, una pequeña localidad de cerca de 50.000 habitantes, en el oeste del país balcánico.
La Alta Corte de Casación y Justicia ratificó el pasado miércoles la extradición del presunto autor del crimen de Cuenca tras denegar su recurso por "infundado".
Los agentes de la Policía Nacional española deberán decidir además sobre el traslado de su coche, un Seat Ibiza verde, con el que viajó a Rumanía y en el que supuestamente asesinó a las jóvenes.
En estos momentos, el vehículo se halla precintado en la comisaría de Lugoj a la espera de que sea examinado para ayudar a clarificar el caso.