Muere un niño de dos años que olvidaron en un coche en Pontevedra

Un niño de unos dos años de edad ha fallecido en el municipio pontevedrés de O Porriño tras pasar unas seis horas olvidado en el interior de un vehículo estacionado en un aparcamiento de tierra en el lugar de A Relva, en la parroquia de Torneiros, en un día de sol y altas temperaturas.

Un particular dio la voz de alarma al 112 sobre las 16.50 horas solicitando asistencia sanitaria para un niño, por lo que se dio el aviso a Urgencias Sanitarias, agentes de la Guardia Civil y Policía Local de O Porriño y también se informó a los miembros del Grupo de Intervención Psicológica en Catástrofes e Emerxencias, dependiente del Colegio Oficial de Psicología de Galicia.

No obstante, los servicios médicos desplazados por el 061 solo pudieron confirmar la muerte del niño, que estaba dentro del coche. La Guardia Civil confirma el fallecimiento del menor e indica que, a falta de autopsia, la muerte podría haberse debido a un golpe de calor, aunque ha quedado abierta la oportuna investigación.

La madre se habría olvidado de dejarlo en la guardería y se dirigió directamente a su puesto de trabajo, según fuentes del Instituto Armado. El pequeño estuvo unas seis horas dentro del coche del párking de la empresa farmacéutica en la que trabaja la madre. Cumpliría tres años en unos meses.

La alarma saltó cuando el padre fue a recogerlo a la escuela infantil, cerca de las 15.45 horas de este jueves, y descubrió que el menor nunca llego a la guardería. La jornada fue calurosa, por lo que la hipótesis es que en el aparcamiento donde permaneció en el interior del vehículo no haya soportado las altas temperaturas.

El Ayuntamiento de O Porriño ha decretado tres días de luto oficial y ha decidido suspender las fiestas de Porrigalia, programadas para este fin de semana, tras morir un niño de unos tres años de edad que pasó horas olvidado en el coche al sol.El alcalde de O Porriño, Alejandro Lorenzo, trasladó a la familia del pequeño, vecinos de ese municipio, en nombre de toda la corporación, "el más sentido pesar y la mano tendida del consistorio para todo lo quenecesiten en estos duros momentos". Aparte de la suspensión de las fiestas programadas para este fin de semana en señal de respeto y luto, las banderas de la casa consistorial ondean ya a media asta.