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La NASA encargará un estudio independiente para examinar la naturaleza y el origen de los fenómenos aéreos no identificados (UAP, por sus siglas en inglés). Es decir, observaciones de eventos en el cielo que no pueden identificarse como aeronaves o fenómenos naturales conocidos, desde una perspectiva científica.

No hay evidencia de que los UAP sean de origen extraterrestre. Dado que el número limitado de observaciones de UAP actualmente dificulta sacar conclusiones científicas, este estudio se centrará en aplicar las herramientas de investigación científica para identificar, recopilar y analizar los datos disponibles.

Los fenómenos no identificados en la atmósfera son de interés tanto para la seguridad nacional como para la seguridad aérea, asegura la NASA. Por eso, aclaran, establecer si estos eventos son parte del mundo natural proporciona un primer paso clave para identificar o mitigar dichos fenómenos, lo que se alinea con uno de los objetivos de la NASA para garantizar la seguridad de las aeronaves.

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El estudio independiente recopilará aportes de expertos en las comunidades científica, aeronáutica y de análisis de datos, y se espera que se complete en unos nueve meses. El equipo de estudio de la NASA estará dirigido por el astrofísico David Spergel.