La juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha enviado hoy a prisión al sargento y a los tres guardias civiles detenidos este martes en Isla Mayor (Sevilla), junto con dos personas más, en una operación contra el tráfico de drogas.
Lo ha hecho tras tomarles declaración por videoconferencia desde Coria del Río (Sevilla), según han informado fuentes jurídicas que han recordado que la causa se encuentra bajo secreto de sumario.
A todos ellos les acusa de los delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, cohecho, denuncia falsa y revelación de secretos. Lamela también ha enviado a prisión a las otras dos personas arrestadas en la operación, si bien solo les imputa los dos primeros delitos.
Con estas detenciones, la Guardia Civil ha desarticulado una organización dedicada al narcotráfico que operaba en el bajo Guadalquivir desde Isla Mayor, introduciendo hachís a través del río mediante lanchas neumáticas, según sostiene el instituto armado.
La operación ha permitido la incautación de cincuenta fardos de hachís, dinero en metálico, varios vehículos a motor entre ellos algunos sustraídos, material informático, telefonía móvil y varios pasamontañas.
Además, los agentes decomisaron embarcaciones semirrígidas con motores, remolques y grúas de embarcaciones, material de transmisiones, motos de agua, diversas herramientas, cartuchería, pastillas de hachís, un surtidor, numerosas garrafas y depósitos de gasolina.
Mientras, en la localidad sevillana de Isla Mayor siguen impactados por la operación desarrollada por la Guardia Civil contra el narcotráfico. Impactados porque los agentes tuvieron que intervenir en el propio puesto de la Benemérita porque arrestaron a cuatro compañeros suyos implicados presuntamente en el tráfico de drogas: tres agentes y un sargento. La mitad de los efectivos del cuartel. Los vecinos no disimulan su sorpresa.