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Felipe VI y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, han dado hoy juntos el pistoletazo de salida a una nueva edición del Mobile World Congress (MWC), la mayor feria de la tecnología que va a reunir durante cuatro días a más de 100.000 profesionales del sector. Después de la cena de bienvenida de anoche con su mensaje en favor de una colaboración "leal y generosa" entre administraciones, el Rey se ha vuelto a encontrar con Puigdemont para abrir oficialmente el congreso, como ya hicieron el pasado año.

Don Felipe, el presidente catalán y el resto de cargos políticos han llegado en minibús al pabellón 3 del recinto ferial de Gran Vía de Barcelona en torno a las 10.10 horas.

En el grupo, estaban la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y el de la Generalitat, Oriol Junqueras; el ministro de Industria, Álvaro Nadal; la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entre otros.

Tras saludar a las autoridades que le esperaban a la entrada del pabellón, el Rey y los miembros de la comitiva han posado ante los medios con aspecto sonriente y cordial.

A continuación, han entrado a una de las salas para mantener un encuentro con John Hoffman, el consejero delegado de GSMA, la entidad que organiza la feria, y directivos de las compañías tecnológicas Huawei, Samsung, Google y Turkcell para exponerles las novedades más destacadas de la feria. Posteriormente, el Rey, Puigdemont y los miembros de la delegación oficial van a hacer un recorrido por algunos de los expositores, entre ellos, el Pabellón España y el de la Generalitat.

ENCAPUCHADOS CORTAN CALLES

Grupos de encapuchados, formados por entre 20 y 30 personas, han cortado esta mañana distintas arterias de la ciudad de Barcelona y han quemado contenedores y neumáticos en la Gran Vía, lo que ha causado fuertes retenciones de tráfico en el día de inicio del Mobile World Congress (MWC).

Aunque fuentes municipales no han podido concretar el origen o las reivindicaciones de estos manifestantes, otras fuentes apuntan a la coincidencia de los hechos con la convocatoria de una protesta estudiantil en contra del aumento de las tasas universitarias.

El primer corte de tráfico se ha producido a las 7.30 horas, cuando uno de estos grupos ha interrumpido en los dos sentidos de la marcha la salida 23 de la Ronda Litoral. Los manifestantes, que portaban bengalas, han permanecido en el lugar unos cuatro minutos y lo han abandonado al llegar la Guardia Urbana. Poco después, a las 7.35 horas otro grupo ha cortado la avenida Diagonal a la altura del número 690, junto a la zona universitaria, y la circulación ha quedado restablecida a las 7.52 horas.

Otro de los cortes, de unos cuatro minutos, ha tenido lugar en la confluencia de Gran Vía con Ciutat de Granada. Posteriormente, hacia las 8.15 horas los manifestantes han quemado unos contenedores en Gran Vía con Plaza Universidad, quedando cortada la circulación en los dos sentidos de la marcha.

La Guardia Urbana ha hecho desvíos por las calles adyacentes hasta que a las 8.35 horas se ha restablecido el tráfico. Poco antes, a las 8.30 horas, otro grupo de encapuchados ha quemado algunos neumáticos a la altura del número 228 de Gran Vía, lo que ha provocado una gran columna de humo y la interrupción del tráfico en un sentido de la marcha.

Para sofocar el fuego se ha solicitado la intervención de los Bomberos de Barcelona que han procedido a su rápida extinción, con lo que a las 9.00 horas se ha vuelto a abrir la circulación en los dos sentidos.