Se cumplen 50 años del primer satélite artificial español

El 15 de noviembre de 1974 fue lanzado al espacio el primer satélite espacial español con fines científicos: el Intasat. El proyecto arrancó en 1969, tuvo que sortear dificultades técnicas pero sobre todo administrativas, pero al final se logró el objetivo. Se creó desde cero en España gracias al empuje del CONIE, el antecedente de la Agencia Espacial Española.

Fueron varios militares e ingenieros civiles coordinados por el INTA los que fueron dando forma a la sonda y su programa, con una exigencia y compromiso que marcó el camino para las siguientes generaciones en el sector espacial español.

El Intasat tenía forma de prisma con doce caras. En cada una de ellas un panel solar proporcionaba la energía necesaria para sus mediciones. Pesaba algo más de 24 kilogramos y costó 185 millones de pesetas, poco más de un millón de euros.

Ese 15 de noviembre de 1974 despegó junto con otros satélites dentro de la cofia de un cohete Delta. El lugar fue la base de EEUU de Vanderberg y todo fue no bien, sino perfecto tal y como recordaba uno de los responsables del proyecto.

El Intasat alcanzó su órbita, pasó por los puntos de control estipulados en el momento previsto, desplegó sus antenas y cumplió con su programa de medición de partículas de la ionosfera y a los dos años se apagó tal y como estaba configurado.

Muchos esperaban que tras este primer éxito con un satélite 'made in Spain' vendrían en el corto plazo otros proyectos espaciales. Pero no fue así. Habría que esperar más de una década para que España volviera a construir sus propios satélites. El Intasat abrió el camino.