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Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han denunciado en una semana a un total de 5.841 adultos y niños por no llevar puesto el cinturón de seguridad o el sistema de retención infantil, de los que el 76% circulaban por carreteras convencionales.

Ello se enmarcó en una campaña de vigilancia a sobre del uso del cinturón de seguridad y los sistemas de retención infantil, que la Dirección General de Tráfico (DGT) realizó entre el 11 y el 17 de marzo, tanto en vías urbanas como interurbanas, según informó la DGT.

La Guardia Civil controló un total de 416.926 vehículos -entre turismos, taxis, vehículos de mercancías y autobuses-, un 4% que los que controló en la anterior campaña, y formuló 5.841 denuncias por no hacer un uso reglamentario del sistema de retención.

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El 76% de las denuncias se pusieron en carreteras convencionales (de un carril por sentido y sin separación física entre ambos), lo que para la DGT supone un “hecho preocupante”, ya que “estas vías siguen siendo las más peligrosas al ser donde mayor número de víctimas mortales se registran y donde conviene, aún más, extremar las precauciones”.

En concreto, 5.524 adultos han sido sancionados por no utilizar el cinturón de seguridad, una cifra ligeramente superior a la anterior edición de esta campaña, repartidos de la siguiente manera: 3.043 conductores, 1.270 pasajeros de los asientos delanteros y 1.211 de los traseros. Todos ellos, expuso la DGT, “no viajaban debidamente protegidos en sus vehículos en caso de haber sufrido un accidente de tráfico”.

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La Dirección General de Tráfico observó que “está demostrado que el cinturón de seguridad, además de reducir en un 50% el riesgo de fallecer en un siniestro de tráfico, protege de salir despedido del habitáculo, así como de impactar contra el parabrisas. En casco urbano, la posibilidad de resultar herido grave o muerto es cinco veces menor si se lleve puesto el cinturón de seguridad”.

En cuanto a los sistemas de retención infantil, obligatorios para menores con una altura igual o inferior a los 135 centímetros, los agentes de la Guardia Civil detectaron a 317 niños que viajaban sin estar sentados en su sillita infantil o que lo hacía de manera incorrecta (245 en los asientos traseros y 72 en los delanteros).

La DGT puso de manifiesto que la utilización de los sistemas de retención infantil es más importante si cabe, puesto que las estadísticas evidencian que “nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado los sistemas de retención obligatorios”. A ello se añade que, “en caso de sufrir un siniestro de tráfico, las lesiones se reducen hasta en un 75% con un uso adecuado” de estos sistemas.

Para intentar evitar este tipo de comportamientos, la Ley de Tráfico y Seguridad Vial elevó en 2022 a cuatro los puntos que se pierden por no llevar puesto el cinturón de seguridad o no utilizar el sistema de retención infantil adecuado o no hacerlo de la manera correcta.