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Uber ha anunciado que suspende el servicio de sus VTC en Barcelona tras la estricta regulación realizada por la Generalitat de Cataluña a favor de las reivindicaciones de los taxistas y que les deja sin posibilidades de realizar su actividad.

Poco después de conocerse la decisión de Uber, Cabify ha dado a conocer también su decisión de marcharse de Barcelona por las mismas razones: La regulación de la Generalitat a favor de los taxistas. Ambas empresas lamentan que su decisión tenga como consecuencia el despido de sus trabajadores.

Sin opciones para trabajar

"Las nuevas restricciones aprobadas por el Gobierno catalán -ha dicho un portavoz de Uber- nos dejan sin opciones para trabajar".

Uber y Cabify dejarán de operar en Barcelona mañana viernes, día 1 de febrero, el mismo día en que entra en vigor el decreto aprobado por el Gobierno catalán que obliga a precontratar los vehículos de alquiler con conductor, los llamados VTC, con una antelación mínima de 15 minutos.

En un comunicado Cabify ha dicho que la regulación tiene "como único objetivo, y por tanto también como consecuencia final, la expulsión directa" de Cabify y de sus empresas colaboradoras.

Consideran que el decreto impone "medidas artificiales y altamente restrictivas" que destruirán un sector que ha empleado a más de 3.000 personas en Cataluña, según sus cifras. Por ello, la empresa ha criticado que el conseller de Territorio y sostenibilidad, Damià Clavet, haya "cedido a la presión y exigencias" del sector del taxi, perjudicando gravemente el interés de los ciudadanos.

"No existe en ningún lugar de Europa"

Para Uber, la obligación de esperar 15 minutos para viajar en un VTC "no existe en ningún lugar de Europa y es totalmente incompatible con la inmediatez de los servicios bajo demanda como Uber".

"En Uber queremos que exista una regulación. Nuestro objetivo es convertirnos en un aliado a largo plazo de las más de 600 ciudades en las que operamos. Y Barcelona no es una excepción", han apuntado.

Gracias a los conductores

Por ello, han reclamado una regulación justa que tenga en cuenta a los conductores y usuarios de VTC "que hoy ven desaparecer su medio de vida y su libertad de elegir cómo se mueven por su ciudad". Además, la empresa ha agradecido a sus conductores haber sido "un ejemplo de dignidad y profesionalidad, incluso en los peores momentos".

Con todo, la empresa se ha mostrado "a disposición de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona para trabajar en una regulación justa para todos" y que tenga en cuenta a los miles de conductores y pasajeros de los VTC en Cataluña.