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Un joven catalán, que ahora ronda la treintena, creó y dirigió la facción delictiva más activa de los Latin Kings, tras protagonizar una fulgurante ascensión interna después de casarse en 2005 con la hermana de uno de los principales cabecillas de la banda en Ecuador, el "King Majestic".

En rueda de prensa, el director de los Mossos d'Esquadra, Manel Prat, y el intendente Jordi Bascompte, jefe de la división de Investigación Criminal, han destacado hoy la importancia de la operación llevada a cabo el pasado 11 de marzo por la policía catalana, que permitió descabezar a la facción Almighty Latin Kings Nation (ALKN).

Según ha detallado Bascompte, el "inca supremo" de esta facción delictiva, la más activa de los Latin Kings, es un joven catalán, de 31 años de edad, que llevaba una vida aparentemente normal, sin grandes lujos ni trabajo remunerado y que vivía gracias a los ingresos de la actividad delictiva del grupo y de las cuotas de entre 5 y 10 euros mensuales que cobraba a los miembros del grupo.

GOLPE CONTRA LA CÚPULA

En el golpe contra la cúpula de esta facción fueron detenidas el pasado 11 de marzo un total de 30 personas e imputadas otras 19, entre ellas el "inca supremo" y los demás miembros de la cúpula o "corona suprema" de esta facción de los Latin Kings, que ya han ingresado en prisión: el "cacique", el "esforzador" y el "secretario" -falta el "tesorero", que vive en Madrid y no ha sido arrestado-.

Conocido como "Babywhite", el "inca supremo" creó la ALKN en 2006, tras su fulgurante ascenso, cuando los Latin -asentados en Cataluña desde 2002 y que actualmente tienen unos 900 pandilleros-, se dividieron en tres fracciones que compiten entre sí: la ALKN, la ALKQN (que también incluye a Reinas) y la Unión de Culturas (a los que despectivamente denominan "torcidos").

La facción, con una estructura muy jerarquizada, se dedicaba según Bascompte a todo tipo de actividades delictivas, como tráfico de drogas a escala internacional, extorsión, robos, palizas por encargo, así como al uso sistemático de la violencia contra bandas rivales para mantener el dominio del territorio y contra miembros de la propia banda que se saltaban la disciplina interna.

Según Bascompte, "Babywhite" dirigía desde Barcelona a la ALKN en toda España, donde contaba con "reinos" asentados en Madrid, Baleares, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía.

La investigación contra esta facción de los Latin se inició en mayo de 2013, tras la detención en Ecuador de un supuesto miembro del grupo con 4,1 kilos de cocaína, a la que siguió el arresto de otro integrante con 9 kilos de cocaína en el aeropuerto de Barajas.

A lo largo de la investigación, los Mossos descubrieron que la banda utilizaba a miembros del grupo como correos humanos para que trasladaran droga desde América Latina y que también engañaba a personas de buena fe que tenían que viajar a España para que, sin saberlo, llevaran droga en sus zapatos o en su equipaje.

Tras meses de investigación -en los que se detuvo a ocho miembros de la ALKN-, los Mossos d'Esquadra descabezaron a la organización el pasado 11 de marzo, en un macrodispositivo en el que arrestaron a 30 miembros de la red y practicaron 17 registros en Barcelona y poblaciones del área metropolitana como L'Hospitalet de Llobregat, Montcada i Reixac, Sant Andreu de la Barca, Badalona y Santa Coloma de Gramenet, además de en Girona.

Los detenidos -de los que seis han ingresado en prisión, cuatro de ellos los miembros de la "corona suprema"- están acusados de los delitos de pertenencia a organización criminal, lesiones, encubrimiento, tráfico de drogas, tráfico de armas, doce robos con fuerza y robos con violencia.

En los registros se intervinieron cinco armas cortas, un arma larga, armas blancas de grandes dimensiones, como machetes, así como pequeñas partidas de droga y objetos y joyas procedentes supuestamente de robos cometidos.

El director de los Mossos d'Esquadra, Manel Prat, ha destacado que esta operación se enmarca en el "cambio de estrategia" imprimido en la policía catalana desde 2011, cuando las bandas latinas dejaron de ser objeto de seguimiento por parte de la Comisaría de Información y pasaron a ser competencia de la Comisaría General de Investigación Criminal.

Prat ha destacado que este cambio de estrategia fue una decisión "muy acertada" ya que habían detectado que las bandas juveniles cada vez más se dedicaban a todo tipo de delitos, parapetadas bajo las siglas de su asociación como grupos que fomentan la defensa de la cultura y los valores latinos.

Desde entonces, los Mossos han llevado a cabo sonados golpes policiales contra las principales bandas latinas asentadas en Cataluña: los Latin Kings (en 2012, con cinco detenidos), los Trinitarios (en 2012, con 12 detenidos), los Blanck Panthers (en 2013, con 30 detenidos), los Bloods (en 2014, con 25 detenidos) y ahora de nuevo los Latin King, con 38 detenidos.