El rey ha dicho hoy, al abandonar el hospital madrileño Quirón San José, que se encuentra "muy bien", que ha sido conveniente para su rehabilitación permanecer unos días más en este centro y que se lo tomará con más calma esta vez antes de volver al trabajo.
"Sí, sí", ha contestado con una sonrisa a la pregunta de los periodistas sobre si será más cauteloso esta vez antes de reiniciar sus actividades.
"Qué malos sois", ha añadido en tono distendido tras dar "muchas gracias" a los numerosos informadores que aguardaban su salida en la calle, ante el hospital, a quienes ha comentado además: "perdón por el frío que estáis pasando".
Desde el asiento del copiloto de un automóvil, vestido con abrigo, don Juan Carlos ha dirigido unas palabras a los numerosos medios informativos que esperaban su salida ante la rampa de acceso al aparcamiento del hospital, donde se ha detenido el vehículo que le ha trasladado a la Zarzuela, un Seat Alhambra, para que el rey, con la ventanilla bajada, hablara con los periodistas.
Tras indicar que se encontraba muy bien y dar las gracias a los informadores que han seguido su hospitalización, el rey ha añadido: "me ha venido muy bien estar aquí para hacer la fisioterapia".
Don Juan Carlos ingresó hace nueve días en el hospital Quirón San José, donde ha recibido hoy el alta hospitalaria tras completar la primera fase de rehabilitación de su intervención quirúrgica en la cadera izquierda.
El rey podrá reanudar inmediatamente sus tareas de despacho y celebrará en los próximos días su habitual encuentro de trabajo semanal con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, unas reuniones interrumpidas por la hospitalización, si bien el jefe del Ejecutivo visitó a don Juan Carlos en el centro médico el pasado domingo.
Don Juan Carlos recibió hoy a mediodía el alta hospitalaria tras completar de forma "muy satisfactoria" la primera fase de rehabilitación y conseguir "prácticamente plena autonomía para los movimientos cotidianos", según el parte médico leído por el traumatólogo Ángel Villamor, que dirigió la operación en la cadera izquierda a que se sometió el rey en la noche del viernes 23.