La inmigración irregular en las costas españolas baja un 30% en 2012
Interior se centra en Melilla y ve mermado el paso de irregulares a Canarias
Un total de 3.804 inmigrantes han entrado en España de forma irregular a través de las costas españolas durante el año 2012, lo que representa un descenso del 30 por ciento respecto al año anterior, según ha anunciado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en la presentación del balance de la inmigración irregular en España.
El Ministerio del Interior ha dado prácticamente por cerrada la entrada a España de inmigrantes irregulares por las costas de Canarias y considera que el punto más conflictivo en la actualidad es Melilla, dada la presión migratoria subsahariana que está recibiendo Marruecos.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz ha resaltado que la llegada de inmigrantes en situación irregular en 2012 descendió un 30 por ciento respecto al año anterior, aunque esa bajada alcanzó el 50 por ciento en el caso de Canarias, prácticamente cerrada como vía de acceso. De este modo, el año pasado entraron en España de forma ilegal 3.804 inmigrantes, frente a los 5.411 del año anterior y los 39.180 de 2006, el año de la denominada "crisis de los cayucos".
Pese a estos datos "extraordinariamente positivos y esperanzadores", Interior ha detectado un aumento de la entrada de estas personas por Melilla, la única vía que ha registrado un aumento debido a la presión de los inmigrantes subsaharianos que llegan a Marruecos huyendo de la situación económica de sus países o de las revueltas en el Sahel.
Según el ministro, las cifras del año pasado en el conjunto de las vías de entrada son las mejores de los últimos doce años y, aunque España ha perdido un poco de atractivo para los inmigrantes irregulares dada la crisis económica que atraviesa, sigue siendo un "paraíso" para esas personas que viven en condiciones "inhumanas" en sus países de origen.
De los 3.804 inmigrantes que entraron de forma ilegal, sólo 173 lo hicieron por Canarias, por lo que, según Fernández Díaz, puede decirse que "la fachada atlántica se ha cerrado como vía de acceso".
De hecho, en 2006 pudieron entrar por las islas 31.678, ha dicho el ministro, quien ha cifrado en 3.631 las personas que lograron entrar en España el año pasado por Baleares y la Península (el 95 por ciento del total, frente a las más de 7.500 que lo hicieron por esta vía en 2006).
En el balance del año resaltan también los datos más esperanzadores de la mortalidad, que se ha ido reduciendo, aunque el año pasado fallecieron en su intento de llegar a España 34 personas.
En la reducción de las cifras globales de la inmigración ilegal ha contribuido, según ha subrayado el ministro, el trabajo de las fuerzas de seguridad y la cooperación internacional, especialmente de Marruecos, pero también de Argelia, Mauritania y Senegal.
CRECEN UN 13% LAS ENTRADAS POR MELILLA
El dato negativo en este balance lo ha aportado la entrada por Melilla, por donde el año pasado lograron "colarse" 262 inmigrantes más que en 2011, aunque en el conjunto de las dos ciudades autónomas se ha reducido un 15 por ciento.
Las redes de tráfico de seres humanos han comprobado cómo se han cerrado algunas vías de entrada y cómo "la imaginación de los criminales se desborda", están buscando otras alternativas, como Melilla y algunos peñones, lo que ha obligado a Interior a reforzar los dispositivos de control y vigilancia.
No obstante y pese a esa preocupación, Fernández Díaz ha valorado la disminución en un 50 por ciento de las llegadas a Melilla con patera y ha dicho que las cifras de entrada por la valla están "muy lejos" de las de 2005.
A Interior le preocupa el "previsible" incremento de la presión migratoria sobre Marruecos y, por ende, sobre Melilla, debido a la crisis de Mali o los 50.000 desplazados por el conflicto sirio, entre otros motivos.
Por ello, ha reclamado una actuación "muy coordinada" no sólo de la Unión Europea, sino también de la Organización de las Naciones Unidas y de los Estados Unidos porque los flujos son "muy intensos".
No ha querido juzgar la actuación en materia de inmigración de Marruecos porque España no puede ser "la ONG internacional" ni decidir la política de un país "amigo y vecino", aunque el Gobierno trabaja para ayudarle ante el problema grave que tiene, ya que no es sólo zona de tránsito de inmigrantes, sino de establecimiento.
Se ha referido a las repatriaciones, que han disminuido un 16,3 por ciento, hasta las 26.456 en 2012, debido a las menores entradas.
Respecto a las expulsiones cualificadas, las que afectan a extranjeros con antecedentes policiales y judiciales han sido 8.809 de las 10.130 practicadas.
La prioridad de Interior, ha añadido el ministro, es expulsar a los inmigrantes que comenten delitos y "no acosar" a los que están de forma irregular pero no delinquen.
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/title}}{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{#href}} {{ text }} {{/href}} {{^href}} {{ text }} {{/href}}
{{/text}} {{/kicker}} {{#title}} {{#text}}