El dolor de la madre del madrileño asesinado en Bataclan conmueve a la Corte de París
En su testimonio, de casi una hora, espetó a los terroristas "sin armas no sois nada"
Quiere una sentencia en consonancia a las atrocidades cometidas por los terroristas
EFE
Cristina Garrido, la madre del ingeniero madrileño de 29 años asesinado en el asalto yihadista a la SalaBataclan de París, ha comparecido en el juicio que se sigue a raíz de los atentados de Paris de noviembre de 2015.
No dudó durante su testimonio en dirigirse a los acusados para llamarlos "cobardes" y para desearles que tengan que soportar cada día "todo el dolor que nos habéis causado a las víctimas".
"Os engañáis si pensáis que sois valientes" porque "sin armas no sois nada", les espetó al tiempo que advertía de que "mientras viva no perdonaré ni a los responsables ni a los cómplices".
Entre los que se sientan en el banquillo solo hay uno de los miembros de los comandos que perpetraron los atentados de aquella noche en la capital francesa, que causaron 130 muertos y varios cientos de heridos, Salah Abdeslam.
Cristina Garrido, vestida de negro riguroso y que dio su testimonio en español asistida y arropada en todo momento por su hija, reconoció que la sentencia que salga de este proceso, que comenzó el 8 de septiembre y debe prolongarse hasta mayo, no le va a "devolver a Juan Alberto".
Pero a pesar de todo insistió en que quiere "una sentencia acorde con las atrocidades cometidas" y que "los condenados cumplan íntegramente su condena en prisión".
Se trata de que no ocurra "como suele pasar en España, que ponen 3.000 años y a los 20 están en la calle", puntualizó en declaraciones con la prensa española al salir de la audiencia.
Seguir el juicio desde Madrid
Varios de los encausados, empezando por Abdeslam, podrían ser condenados a cadena perpetua si son declarados culpables de los delitos por los que se les acusa.
Cristina Garrido denunció que se hubiera publicado en internet una foto con víctimas del atentado en la que se veía a su hijo, lo que le produce "mucha ansiedad".
También señaló que está tratando de gestionar con la Subdirección General de Víctimas del Gobierno español la posibilidad de seguir en directo desde su domicilio en Madrid el juicio por una web de radio a la que sí pueden acceder otras víctimas o familiares desde Francia.