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La organización de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) repartirá casi ocho millones de comidas a los más de 300.000 jóvenes que se han apuntado al servicio de alimentación organizado con motivo del encuentro con el papa Benedicto XVI. Para hacer frente a la avalancha de jóvenes que se espera en Madrid la organización ha llegado a un acuerdo con distintas asociaciones de restaurantes de la comunidad que repartirán seis millones de comidas. Son 2.300 establecimientos de la comunidad de Madrid, unos 1.200 bares y restaurantes independientes y cerca de mil establecimientos de cadenas de restauración como Vips, Mc Donnalls, Rodilla o Telepizza. Así, a lo largo de la semana, los jóvenes podrán adquirir un "menú del peregrino" en diversos establecimientos gracias a unos tickets que les entregarán los responsables de la JMJ y cuyo valor es de 6`50 euros.

De este modo se establece un sistema que nace para complementar las carpas de picnics tradicionales de otras Jornadas Mundiales de la Juventud y al mismo tiempo impulsar a la restauración madrileña que podrá dar a conocer platos típicos de nuestra tierra y conseguir una recaudación extra en el mes de Agosto tal y como reconoce Marco Ampolo, gerente del restaurante Graze Mille de la madrileña calle Mayor.

Para Jimena Moreno , responsable de Rodilla en la calle Gran Via, el ticket permite ahorrarse un dinero al peregrino ya que el coste de lo que consume es un euro inferior al precio de venta al público en general.

Pero el verdadero reto de los organizadores consiste en dar de desayunar, de comer y de cenar a los cientos de miles de peregrinos y voluntarios que pasarán el fin de semana en Cuatro Vientos, donde se desarrollarán durante estos días las actividades de las Jornadas. Aquí, la empresa Aramark repartirá 1,5 millones de "picnics", entre los que hay menús normales pero, también, especiales para celíacos, vegetarianos y diabéticos. La cena del menú normal del sábado incluirá una botella de agua, un bocadillo de jamón, un sobre de aceite de oliva, una ensalada y un yogur. En el caso de los menús especiales, a los celíacos se les ofrecerá lo mismo pero con pan sin gluten, a los vegetarianos un bocadillo de paté vegetal y una menestra de verduras en lugar de la ensalada, y a los diabéticos tostadas con jamón, también menestra, y un yogur sin azúcar.

La comida la llevarán al aeródromo 125 camiones, de los cuales 27 son solo para el pan, y los alimentos serán distribuidos por 950 personas en 25 carpas. En cuanto al agua, se repartirán 1,2 millones de botellas que complementarán a los cerca de 2.000 grifos que ha instalado en el recinto el Canal de Isabel II.