| Web del Manuel Bartolomé Cossío
(Actualizado

El 80% de los padres cree que debería haber algún cambio en el concepto de deberes, según el estudio de IKEA presentado este jueves, 8 de septiembre, 'Salvemos las cenas: cómo influyen los deberes en el día a día de los hogares españoles'. Este estudio se elabora para conocer el impacto de los deberes en los hogares españoles buscando propiciar un mayor tiempo de calidad en las cenas familiares.

El documento recoge los resultados de 2.400 entrevistas realizadas en todo el ámbito nacional a padres con hijos de entre siete y 17 años, niños y adolescentes de ese mismo rango de edad, así como profesores de primaria y secundaria.

Así, el estudio revela que los padres creen que debería haber algún cambio en el concepto de deberes, bien dedicándole menos tiempo a hacerlos, bien realizando actividades como leer libros, consultar en la red, ver una película o visitar un museo.

En esta misma línea, el 95% de los profesores de primaria y secundaria encuestados cree que hay otras actividades más allá de los deberes diarios que pueden ayudar a los niños a reforzar sus aprendizajes como las tareas cotidianas (79,7%) o el juego (13,7%).

Para el catedrático de sociología en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, Rafael Feito, algunos datos "interesantes" del estudio son que padres y madres consideran que los deberes son actividades "meramente rutinarias alejadas de la creatividad". Feito explica que aunque los profesores dicen que son ellos quienes determinan los deberes, indican que en realidad se atienen a los contenidos de los libros de texto.

De esta forma, el estudio revela que un 65% de los padres opina que sus hijos se sienten agobiados o cansados por el tiempo que le dedican a los deberes. A su vez, un 43,6% de los niños encuestados afirma que los deberes les agotan y les dejan poco tiempo para estar con la familia y amigos, y un 27% se sienten presionados por tener que hacerlos, si bien para un 56,4% los deberes les ayudan a trabajar mejor en el colegio o instituto.

Por otra parte, el 62,4% de los padres que han participado en el estudio cree que los deberes consisten en hacer ejercicios repetitivos o memorizar (22%). En cuanto a la tipología de deberes, una gran mayoría de los profesores (81%) dice seguir las actividades que figuran en el programa de estudios.

DEMASIADO TIEMPO DEDICADO A LOS DEBERES

Respecto al tiempo que los niños dedican a los deberes, la encuesta revela que para un 33% de los padres es excesivo. Así, el 39% declara que sus hijos dedican de media entre 30 minutos y 1 hora al día, y un 34,9% mencionan que entre una y dos horas, según el estudio.

Además, el 42,4% de los alumnos encuestados cree que tiene que dedicar demasiadas horas a hacer deberes en casa y para el 72% son aburridos. Esta opinión aumenta hasta el 77% entre los que tienen 15 a 17 años, que además le dedican a los deberes más tiempo de la media: un 40% de niños de este rango de edad declaran dedicar entre una y dos horas diarias.

Esta percepción contrasta con la que tiene la mayoría del profesorado de primaria y secundaria que afirman no mandar deberes habitualmente. Para el 41% que declara mandar deberes, el principal objetivo es "que los niños puedan practicar e interiorizar los conceptos aprendidos en clase" (62,7%) o "generar un hábito de estudio" (28,8%).

Respecto al tiempo de dedicación a los deberes, el 45% de los profesores considera como óptimo dedicar a diario entre 30 minutos y una hora, y solo el 11,3% cree que deberían ocupar a los niños entre una y dos horas.

El estudio también indaga en cómo influyen los deberes en los hábitos de vida y concretamente en las cenas. Así, un 41,9% de los padres considera que el tiempo que dedican sus hijos a hacer deberes supone un impedimento para disfrutar de más tiempo en familia y el 49,8% de los niños y adolescentes cree que si tuvieran menos deberes podrían disfrutar de más cenas en familia.

Por otra parte un 45,4% de los padres del estudio afirma que la familia cena a diario mientras ve la televisión. En este sentido, Feito valora que "es llamativo el hecho de que cerca de la mitad de los padres y madres declaran que se ve la televisión durante la cena, lo que podría indicar que no se aprovecha este tiempo para conversar".