| Telemadrid
(Actualizado

La nave rusa Soyuz MS-04, con dos tripulantes a bordo, se acopló hoy con éxito a la Estación Espacial Internacional (EEI), informó el Centro de Control de Vuelos Espaciales de Rusia.

El acoplamiento se produjo en modo automático como estaba previsto.

La Soyuz, lanzada esta mañana desde el cosmódrono de Baikonur, (Kazajistán), llevó a la EEI al cosmonauta ruso Fiódor Yurchijin y al astronauta estadounidenses Jack Fischer.

La nave, que en poco más de seis horas de vuelo dio cuatro vueltas a la Tierra, se enganchó en el puerto de atraque del módulo Poisk del segmento ruso de la plataforma espacial.

Una vez que se compruebe el hermetismo del acoplamiento y se igualen las presiones de la Soyuz y la EEI, se abrirán las compuertas y los recién llegados podrán acceder a la estación orbital, donde les esperan sus actuales tripulantes: el ruso Oleg Novitski, la estadounidense Peggy Whitson y el francés Thomas Pesquet.

Inicialmente, estaba previsto que a bordo de la Soyuz MS-04, viajaran a la EEI dos cosmonautas rusos, pero a fines del año pasado Roscomos, la agencia espacial rusa decidió reducir de tres a dos los miembros de la misión rusa en la estación espacial, por lo que hoy solo viajó Yurchijin.

Esta situación se mantendrá al menos hasta finales de 2018, cuando está programado el acoplamiento a la EEI del nuevo módulo científico ruso "Naúka".

En un comienzo, Roscosmos barajó la posibilidad de que la tercera plaza de la Soyuz SM-04 fuera ocupada por un astronauta extranjero, pero finalmente se desestimó por no contar con un candidato con la suficiente preparación.

Por ello, en la butaca libre se cargó un contenedor con 70 kilogramos de carga, fundamentalmente alimentos.

La EEI, un proyecto de más de 150.000 millones de dólares (139.907 millones de euros) en el que participan 16 naciones, actualmente está integrada por 14 módulos permanentes y orbita a una velocidad de más de 27.000 kilómetros por hora a una distancia de 400 kilómetros de la Tierra.

La órbita de la plataforma es elevada cada cierto tiempo con ayuda de los propulsores de naves acopladas a ella, ya que la EEI pierde diariamente entre 100 y 150 metros de altura debido a la gravitación terrestre, la actividad solar y otros factores.