10 escapadas únicas a menos de dos horas de Madrid
Te proponemos 10 lugares a menos de dos horas de la capital que no podrás perderte
SARA PALMER
¿Estás buscando dónde pasar un fin semana cerca Madrid? Las posibilidades en cuanto a excursiones cerca de la Comunidad son enormes, donde podrás desconectar del ajetreo de la gran ciudad.
Desde monumentos espectaculares a rutas por la naturaleza, en este artículo te proponemos 10 lugares a menos de dos horas de la capital que no podrás perderte.
Este pueblo es una de las joyas de la despoblación de España. La Vereda es un pueblo abandonado y aislado que forma parte de la ruta de los pueblos negros de Guadalajara. Un rincón mágico formado por casas de piedra que se asientan sobre yacimientos de pizarra en las tierras de la Sierra de Ayllón, cerca del embalse de El Vado.
Mezcla las casas rehabilitadas con las destruidas, situado en un terreno de barrancos rocosos. Al ser un terreno de difícil acceso, la mejor manera de llegar es yendo hasta el embalse de El Vado. Estuvo a punto de desaparecer, pero gracias a una oposición de un grupo de arquitectos de Madrid y Guadalajara, se ha convertido en un referente en cuanto a preservación y defensa de la cultura tradicional
Playa de Bolarque
Situado en el embalse de Bolarque en Guadalajara, es lo más parecido a una playa y se encuentran tan solo a 115 kilómetros de Madrid. Cuando llega el verano se convierte en uno de los destinos favoritos de todas las familias.
La playa dispone de chiringuito, club náutico y socorristas para convertir este paraje en un lugar seguro y divertido.
También disponen de alquiler de kayaks, con los que podrás acercarte hasta la Cueva de las Tortugas, un lugar accesible solo desde el agua y donde podrás encontrar varios ejemplares de tortugas.
Molinos de viento de Alcázar de San Juan
Situados en el Cerro de San Antón se encuentran cuatro molinos de viento que conservó Alcázar de San Juan, denominados Fierabrás, Barcelona, Rocinante y Barataria.
Un lugar en la Mancha que recuerda la obra de Cervantes y que no puedes perderte. Su principal encanto es la gran panorámica visual conocida como el “Mirador de la Mancha”, donde podrás disfrutar de amaneceres y atardeceres espectaculares.
Parque Arqueológico de Carrenque
Está constituido de restos de una villa romana en la provincia de Toledo. Fue descubierto en 1983 por Samuel Iglesias y es conocido arqueológicamente como el yacimiento de Santa María de Debajo de Carranque.
Este lugar surgió como centro de explotación de los recursos agrícolas del entorno y en su época se configuraba como un importante centro de poder por definir y caracterizar.
La visita dura aproximadamente una hora y media y en ella podrás ver la colección de mosaicos de la villa que lo convierte en uno de los conjuntos más importantes de la península ibérica.
Barrancas de Burujón
A tan solo 99 kilómetros de Madrid encontramos uno de los espacios más espectaculares del país, las Barrancas de Burujón. Este paisaje de piedra arcillosa rojiza recuerda al Gran Cañón de Colorado. El espacio natural está formado por las aguas del Embalse de Castrejón y por más de un kilómetro de cortados arcillosos formados a causa de la erosión del viento.
En 2010 fueron declaradas Monumento Natural por la Junta de Castilla-La Mancha. También están clasificadas como Zona de Especial Protección para las Aves y Lugar de interés Comunitario de la Red Natura 2000.
Sin duda, el mejor momento del día para visitar este lugar es al atardecer, momento en el que los cortados arcillosos adquieren un color rojizo, convirtiéndose en un paisaje de película.
Cuevas del Cerro del Águila
Una maravilla subterránea situada a 160 kilómetros de Madrid. Las Cuevas del Águila se encuentran en un cerro de rocas dolomías nombrado Cerro de Romperropas, en Ávila.
Las cuevas se formaron en una plataforma marina carbonatada del Cámbrico hace más 500 millones de años. El cerro está oculto por un bosque de encinas, lo que hace este lugar más atractivo.
La visita guiada dura unos 40 minutos aproximadamente y en ella verás estalactitas, estalagmitas y columnas de roca caliza multicolor que te dejarán fascinado.
Este plan es perfecto para hacer una escapada en verano y descansar del calor, pues dentro de estas cuevas la temperatura ronda los 15 grados durante todo el año.
Palacio Real de La Granja de San Ildefonso
El Real Sitio de La Granja de San Idelfonso es una de las mejores muestras del esplendor monárquico del siglo XVIII. Este lugar, declarado conjunto Histórico Monumental, está situado en la sierra de Guadarrama, a unos 80 kilómetros de Madrid.
El palacio, ejemplo de arquitectura palatina europea, comenzó su construcción en 1721 bajo el reinado de Felipe V de España, que quedó fascinado con la belleza del lugar.
La mayor atracción es sin duda sus jardines botánicos, con una extensión de seis kilómetros y un conjunto de fuentes de estilo Versalles.
Ruta de las caras y Embalse de Buendía
Se trata de un paraje natural en el que se encuentran unas 18 esculturas y bajorrelieves de uno a seis metros de altura, esculpidas a partir de 1992 por Eugelio Reguillo y Jorge J. Maldonado.
La ruta es un sendero circular de 1,5 kilómetros rodeado de pinares y rocas areniscas. El recorrido es de acceso libre, señalizado y gratuito, y se trata de un sendero sencillo que podrás realizar en familia y mascotas.
En sus proximidades se encuentra el pantano de Buendía, ideal para refrescarse en verano. Cuenta con dos zonas de baño protegidas, y podrás realizar actividades acuáticas como paseos en barco o kayak. Además, esta zona es ideal para pescar debido al gran tamaño de los ejemplares.
Bosque Valsaín
Si te gustaría escapar del ruido de la ciudad, el Bosque Valsaín es el plan que buscas. Ubicado en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, es uno de los pocos bosques salvajes que quedan cerca de Madrid.
Se trata de un hermoso paraje de altos pinos y hermosos robles y encinas, bañado por las aguas del río Eresma. Un lugar perfecto para desconectar y pasar un día fresco en verano.
Pedraza
La Villa medieval de Pedraza es uno de los pueblos favoritos por los madrileños para hacer una escapada, y no es de extrañar, ya que es uno de los pueblos más bonitos y mejor conservados de España.
Pedraza fue declarada Conjunto Monumental en 1951 y reconocida Premio Europa Nostra en 1966.
Paseando por sus calles empedradas podrás disfrutar del castillo, la muralla, las fachadas blasonadas, la cárcel o la plaza mayor.