10 planes para viajar a Grecia sin salir de Madrid

Es uno de los destinos por excelencia y es conocida por el azul de sus mares, la hospitalidad de sus gentes y el blanco de sus iglesias isleñas. Su gran valor histórico, su gastronomía y la variedad de sus paisajes sitúan a Grecia en la cúspide del turismo europeo.

Si este verano no sales de Madrid, aquí te dejamos una selección de planes y sitios para adentrarte de lleno en la cultura helena sin salir de la región:

1. Para romper platos y comer una buena Mussaka

Si lo primero que tienes en mente es degustar la deliciosa gastronomía helena, una buena opción es la Taberna Griega, en Malasaña. En este coqueto local, decorado con fotos de la Acrópolis y de idílicas estampas de Santorini, se puede degustar desde la típica Mussaka (una especie de lasaña con base de berenjena y patata) y su tradicional salsa Tsatsiki (yogur griego con pepino y ajo) hasta el queso feta al horno o sus hojas de parra rellenas de arroz, entre otros platos típicos, a precios más que asequibles.

Lo mejor de todo: si vas a comer un domingo podrás unirte a las danzas griegas y romper platos mientras tu paladar viaja por los exquisitos sabores de la comida mediterránea.

Otra opción es Periplo, en la calle Modesto Lafuente. Su cocinero, Giannis, natural de Salónica, prepara los platos más característicos del país, como la ensalada cretense (pan, tomate, queso feta y cebolla) o el típico gyros de cerdo o pollo. Lo mejor es reservar con antelación para asegurarte un sitio, ya que disponen de pocas mesas.

2. Para los más 'cocinillas'

También está la opción de comprar los ingredientes y lanzarte a preparar alguna receta en casa. En Greek and Shop puedes pedir comida para consumir en local pero también comprar productos artesanales como mermeladas, mieles y postres griegos para los clientes más dulces o encurtidos, salsas y pan de pita para los más salados, además de refrescos.

3. Sumergirse en la espiritualidad griega

Grecia es uno de los países más religiosos de Europa. Sus iglesias cristianas ortodoxas abundan en cada esquina de sus calles, incluso en las zonas menos habitadas. La catedral ortodoxa griega de San Andrés y San Demetrio, ubicada en el distrito de Chamartín, cuenta con una fachada de ladrillo marrón que la hace pasar desapercibida, pero sus decorados al estilo bizantino a base de tonos azules y dorados que reflejan pasajes de la Biblia te transporta a cualquier templo heleno.

Importante: no ofrece visitas al público, por lo que la única opción para visitarla es durante las ceremonias.

4. Como en una tragedia clásica

El Parque Europa, en el municipio de Torrejón de Ardoz, alberga un teatro que recrea los que existían en la antigua Grecia. Construido sobre una colina y con un escenario con forma ovalada, acoge restos de columnas y de esculturas, entre las que cabe destacar una réplica de la Victoria de Samotracia, que data del año 190 a. C. y que se encuentra en el Museo del Louvre de París.

5. A través de las páginas...

Viajar a Grecia a través de la imaginación es posible gracias, en gran parte, a los libros. Con Mi familia y otros animales (1956), novela autobiográfica y primera parte de la trilogía de Corfú del científico y escritor británico Gerald Durrell, el lector se adentra en una familia que abandona el clima lluvioso del Reino Unido y se va a vivir a Corfú. Allí, el protagonista, Gerry, descubre su vocación naturalista, reforzada por los personajes excéntricos que va conociendo en la isla.

6. Por el séptimo arte

Ya nos sabemos los clásicos: Mamma mia!, Mi gran boda griega, Zorba el griego… Hay vida más allá. De hecho, no son pocas las películas griegas galardonadas estos últimos años. La más famosa es Canino (2009), obra estrella de Yorgos Lanthimos, exponente del cine heleno, en la que la narración del día a día de una familia disfuncional en plena crisis de 2009 se ganó un galardón en Cannes ese mismo año y la nominación al Oscar a mejor película de habla no inglesa en 2011.

De obligado visionado también son la violenta y desgarradora Miss Violence (2013), Un toque de canela (2003), una oda a la comida y la familia, y Chico comiendo comida de pájaro, duro retrato de la asfixia de la recesión.

7. Sobre el escenario

Para los más bailarines o con la curiosidad de lanzarse a los escenarios, apuntarse a clases de es la solución. La escuela ‘Paso a Paso’, en la calle Doctor Piga 5, en Lavapiés, ofrece unas cuatro clases semanales de danzas tradicionales griegas en horario de mañana y tarde. También cuentan con sesiones de iniciación para principiantes.

8. Aprender el idioma de los dioses

No hay mejor manera de conocer la idiosincrasia de un país que aprender su lengua. En Madrid hay varios centros donde poder apuntarse a clases de griego moderno, la más conocida es la Escuela Oficial de Idiomas, pero la mayoría de las universidades públicas cuentan con centros de idiomas que imparten todos los niveles de griego. Si eres estudiante universitario lo más probable es que cuentes con descuentos de matrícula.

9. En compañía, mejor que solo

Para involucrarse en la cultura griega en compañía, GREMA, la Asociación de familias griegas y españolas de la Comunidad de Madrid, organiza actividades socioeducativas de todo tipo para fomentar la interculturalidad y la preservación de la lengua y las tradiciones griegas en familias griego-españolas.

10. La máxima representación griega en España

Si finalmente das el paso y decides entregarte a la cuna de la civilización y la belleza por completo, en la embajada griega, situada en la Avenida Doctor Arce, 24, podrás informarte de todo lo que necesitas para viajar. Además, su página web ofrece información actualizada de la situación política del país a través de un portal de noticias y una sección dedicada a la Historia y las relaciones entre España y Grecia.