Chueca es el centro del Orgullo LGTBI en Madrid |
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En 1989, un pequeño barrio junto a la Gran Vía se convirtió en epicentro de los movimientos LGTBI en España. Por entonces Chueca era una zona degradada por el abandono y la droga y la marginación, perdía población joven y había perdido la mitad de su población entre los 60 y los 80.

Los homosexuales fueron estableciéndose en este rincón olvidado de Madrid por el que pocos apostaban.

La razón por la que la comunidad gay y lesbiana empezó a poblarlo era una de las consecuencia de esa degradación: los bajos precios de los alquileres.

La inseguridad y la marginalidad en torno a la plaza de Chueca, uno de los mercados de la heroína en Madrid, aún era patente a comienzos de los 90.

Veinte años más tarde de la reivindicación de Stonewall (Nueva York), el movimiento por los derechos de las personas gays, bisexuales y transexuales consiguió modificar completamente la estructura social de un barrio y recuperar una de las zonas más degradadas del centro de Madrid.

Pioneros

Madrid se despedía de los 80 con bares LGTBI aún de tintes clandestinos y oscuros con timbre o mirilla.Mili Hernández abrió Berkana, la primera librería LGTBI de Madrid. Y casi sin ser consciente de la trascendencia se convirtieron en los primeros en colocar una bandera arco iris en la puerta. La historia de Chueca es crucial para el movimiento LGTBI.

Entre esos pioneros Mili Hernández, Miguel Ángel Sánchez (presidente de COGAM), Alfonso Llopart, Miguel Ángel Fernández, Pedro Zerolo o Jordi Petit, entre muchos otros.

La Troje, el LL, el Black & White o el café Figueroa y otros locales LGTBI incipientes que fueron a más. La calle Pelayo se convirtió en el lugar más variopinto de todo Madrid. Los negocios de toda la vida, casas de comidas, floristerías o zapaterías convivieron desde el primer momento con una tienda de sadomasoquismo o un bar de alterne.

Pedro Zerolo, por entonces presidente de los colectivos de gays y lesbianas de toda España era un joven abogado y activista que consiguió juntar a los miembros para un proyecto común que acabaría siendo el alma de Chueca y el movimiento LGTBI. Un movimiento asociativo que abrió la puerta a los comerciantes y a los primeros grandes empresarios del mundo LGTBI.

Los inicios del Orgullo

La primera gran reivindicación de Chueca salió a la calle en 1994.

Sin embargo, los primeros Orgullos contaban con apenas varias decenas de miles de personas. En la primera manifestación del Orgullo LGTBI de Chueca, apenas 500 participantes en una manifestación que discurrió desde Tirso de Molina a la Puerta del Sol.

En la segunda ya fueron unas 2.000 personas en un recorrido que se inició en la Puerta de Alcalá y acabó en Sol.

Europride 2007, el punto de inflexión

El barrio se llenaba durante los días de celebración hasta que llegó el Europride 2007. Entonces, el Orgullo LGTBI se desbordó con más de 250.000 personas. La marca Chueca adquirió un carácter internacional.

La fiesta, la libertad de ser y vivir como quieras y la reivindicación se dieron la mano en una de las mayores transformaciones sociales de un barrio en apenas una década. Una ventana al mundo de toda la expansión de la visibilidad LGTBI.

Desde entonces el Orgullo LGTBI va ligado a la recuperación del castizo barrio como epicentro de la diversidad y la tolerancia.